El juez que instruye la causa contra los cuatro detenidos el pasado martes 15 de octubre es el mismo que llevó la causa contra los detenidos en el desalojo de Centro Social Ocupado La Fábrica. Luis Francisco de Mesas Rojas, titular del juzgado número 2 de Valencia, también detuvo en aquella ocasión a numerosas personas y realizó registros en busca de supuestos explosivos que no eran más que material para malabares. En La Fábrica, lo mismo que en le Malas Pulgas, la empresa fascista Levantina de Seguridad custodiaba el inmueble tras el desalojo.

Mesas Rojas es también el juez que instruyó la causa contra los antifascistas detenidos tras la convocatoria racista de España 2000 en el Barrio de Russafa. En este caso hubo un gran despliegue de la prensa, varias personas fueron detenidas - algunas de ellas meses después de los hechos- y se pidieron fianzas astronómicas para luego tener que sobreseer el caso.
Mesas Rojas ha permitido que España 2000 se presente como acusación particular en el proceso contra los detenidos de Russafa. La plataforma liderada por Roberto Navarro ha pedido que se vuelva a imputar a todos los antifascistas después de que el juez hubiera sobreseido provisionalmente el expediente.

Mesas Rojas también instruye la causa contra los 52 detenidos en el desalojo del cine Princesa, donde murió el joven José Luis Enguídanos. En el juicio que se celebrará en Diciembre se le piden a los okupas más de 30 años de cárcel y 13 millones de pesetas.

Este juez recibe el apodo de “pequeño Garzón” en ámbitos judiciales por su afán de protagonismo y por los juicios espectaculares y enrevesados que instruye. Su afán de popularidad le ha hecho poner al movimiento okupa y antifascista en el punto de mira de sus dossieres represores. Para este juez tener un ordenador es sinónimo de poseer un arma, leer fanzines es un delito y juntarse más de cuatro una asociación ilícita.

Este juez estuvo varias horas reunido con el Jefe de la Brigada de Información de la Policía española, justo antes de tomar declaración a los detenidos del 15 de octubre. Tras esta conversación, Mesas Rojas cambió los cargos de "desordenes, lesiones y daños" a "asociación ilícita, destrozos y lesiones terroristas". Este juez negó el Habeas Corpus para los detenidos, cuando familiares y gente de fuera sabíamos que presentaban evidentes síntomas de haber sido golpeados. Apuró al máximo las 72 horas que podía tener incomunicados a los detenidos, estos pasaron hambre y recibieron amenazas de muerte por parte de la policía. Amigos, familiares y personas interesadas fueron golpeadas e identificadas cada vez que intentaban congregarse a las puertas del juzgado. Este juez lleva meses elaborando un dossier contra el movimiento okupa, estas detenciones son solo un montaje para justificar esos informes.

NO A LA CRIMINALIZACIÓN DE LOS CENTROS SOCIALES
NO A LOS JUECES FASCISTAS
BASTA YA DE MONTAJES POLICIALES Y JUDICIALES
LIBERTAD SIN CARGOS COMPAÑEROS ENCARCELADOS