Del rechazo masivo del Pueblo Griego a la sumisión colonial del Gobierno de Tsipras

El Pueblo Griego dijo un no contundente a la política genocida de la Troika en el Referendúm convocado por su Gobierno. En una aparente paradoja ese propio Gobierno ha aceptado un programa de imposiciones de la UE que va mucho más allá de las previstas inicialmente

Una victoria política táctica se ha convertido, finalmente, en una derrota estratégica en toda regla.

Es obvio que Tsipras no tenía una hoja de ruta para confrontar con el proyecto imperialista pangermánico, que hoy representa la UE, en una situación como la creada a raíz de la convocatoria del Referendúm y el rechazo masivo expresado en él, por parte del Pueblo Griego, a ese proyecto neoimperial.

La respuesta de la Troika, encabezada por el neofascismo-imperialista germánico, era previsible. No pueden aceptar por las buenas victoria política alguna de ningún Pueblo en Europa continental, pero la actitud de total claudicación de Tsipras, era más difícil de prever. Aunque desgraciadamente en la historia de la lucha popular, abundan situaciones que podríamos llamar, similares.

De la experiencia griega hay que aprender y para eso hay que estudiar seriamente el proceso en toda su complejidad . Hay una primera lección clara,  sin teoría revolucionaria no hay práctica revolucionaria, en el mejor de los casos puede haber tacticismos sugerentes y creativos.

En el Estado Español se van configurando las condiciones para un auténtico proceso de ruptura con el actual Régimen, a favor de la democracia y de la justicia social. Hemos de aprender de la experiencia griega para no caer en parecidos errores.