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Nacionales Galiza :: 21/08/2014

[Gal/Cast] Sindicatos galegos contra a discriminaçom da mulher no trabalho

La Haine-Galiza
Hacemos un llamamiento a denunciar enérgicamente el hecho de negarle a una mujer en el Sergas el derecho a un puesto de trabajo por estar embarazada

Galego

Este verán nas contratacións do hospital Xeral aconteceu un feito moi grave. A unha celadora embarazada non lle deixaron asinar o contrato tras o informe da unidade de prevención de riscos laborais (UPRL) declarándoa non apta, cando o procedemento a seguir seria adecuarlle o posto de traballo ou facilitarlle a baixa por maternidade. Trátase de protexelas e non de mandalas para a casa negándolles o dereito a un posto de traballo.

Estar embarazada non é estar enferma, e tense todo o dereito a un posto de traballo, o contrario é cometer un acto de discriminación laboral e sexista vulnerando un dereito fundamental.

Dende o poder, dende os que gobernan a economía e pretenden gobernar as nosas vidas, decidiron que o modelo de igualdade de mulleres e homes, o modelo da independencia e da autonomía das mulleres non é rendíbel para os seus intereses, e pretenden impor un modelo tradicional, no que as mulleres asuman o rol familiar e os homes sustentadores o de ‘cabeza de familia’. Un acordo da dereita política e económica que vai, por suposto, da man da Conferencia Episcopal sempre esperando a súa oportunidade para esmagar vidas e liberdades.

Neste modelo vai afondando o Partido Popular, no Estado español e na Galiza, con cada norma, con cada reforma, con cada recorte, cada vez que un dos seus fala libremente para amosar “a súa superioridade intelectual fronte a unha muller”. Así son e así se manifestan.

Queren que volvamos a ter a consideración de mulleres coidadoras, pechadas na casa, incapaces de decidir, mulleres dependentes e necesitadas esperando a que nos digan o que podemos ou non podemos facer. Mais hoxe, as mulleres traballadoras, as mulleres que enfrontamos as nosas vidas, con toda a enerxía e coraxe, non estamos dispostas a dar ningún paso atrás na conquista dos nosos dereitos.

Por iso dende a Plataforma Galega polo Dereito Aborto e dende os sindicatos facemos un chamamento a denunciar enerxicamente o feito de negarlle a unha muller no Sergas o dereito a un posto de traballo por estar embarazada, pois sentaría un precedente gravísimo en recortes de dereitos das mulleres e do dereito ao traballo que non estamos dispostas/os a tolerar.

Castellano

 

Este verano en las contrataciones del hospital Xeral ha sucedido en hecho muy grave. A una celadora embarazada no le dejaron firmar el contrato tras el informe de la unidad de prevención de riesgos laborales (UPRL) declarándola no apta, cuando el procedimiento a seguir sería adecuarle el puesto de trabajo o facilitarle la baja por maternidad. Se trata de protegerlas y no de mandarlas para casa negándoles el derecho a un puesto de trabajo.

Estar embarazada no es estar enferma, y se tiene todo el derecho a un puesto de trabajo, lo contrario es cometer un acto de discriminación laboral y sexista vulnerando un derecho fundamental.

Desde el poder, desde los que gobiernan la economía pretenden gobernar nuestras vidas, decidieron que el modelo de igualdad de mujeres y hombres, el modelo de la independencia y de la autonomía de las mujeres no es rentable para sus intereses, y pretenden imponer un modelo tradicional, en el que las mujeres asuman el rol familiar y los hombres sustentadores ode “cabeza familia”. Un acuerdo de la derecha política y económica que va, por supuesto, de la mano de la Conferencia Episcopal siempre esperando su oportunidad para pisotear vidas y libertades.

En este modelo va ahondando el Partido Popular, en el Estado español y en Galiza, con cada norma, con cada reforma, con cada recorte, cada vez que uno de los suyos habla libremente para mostrar “su superioridad intelectual frente a una mujer”. Así son y así se manifiestan.

Quieren que volvamos a tener la consideración de mujeres cuidadoras, encerradas en casa, incapaces de decidir, mujeres dependientes y necesitadas esperando a que nos digan lo que podemos o no podemos hacer. Pero hoy, las mujeres trabajadoras, as mujeres enfrentamos nuestras vidas, con toda la energía y coraje, no estamos dispuestas a dar ningún paso atrás en la conquista de nuestros derechos.

Por eso desde la Plataforma Galega por el Derecho al Aborto y desde los sindicatos hacemos un llamamiento a denunciar enérgicamente el hecho de negarle a una mujer en el Sergas el derecho a un puesto de trabajo por estar embarazada, pues sentaría un precedente gravísimo en recortes de derechos de las mujeres y del derecho al trabajo que no estamos dispuestas/os a tolerar.

 


 

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