México DF: Concentración en apoyo a las comunidades zapatistas y al EZLN

Después de una reciente serie de agresiones y amenazas contra las comunidades zapatistas por el gobierno federal y estatal de Chiapas y los grupos paramilitares OPPDIC (Organización para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos) y el “Ejército de Dios, Alas de Águila”, y en medio de una serie de artículos criminalizando a las bases del EZLN por “atacar a campesinos en Agua Azul” el pasado 7 de febrero, alrededor de 60 personas nos reunimos ante la Casa del gobierno de Chiapas en el Distrito Federal el miércoles 10 de febrero para expresar nuestra solidaridad incondicional con las comunidades zapatistas y el EZLN.

Como una muestra de nuestro aprecio para el gobierno, varios jitomates y huevos podridos volaron hacia las paredes de la Casa, que quedó pintada con arte zapatista y varios mensajes: “Fuera ejército de Chiapas”, “Muera el mal gobierno”, “Alto a la represión en Bolón Ajaw”, “Vivan los zapatistas”, Viva el EZLN”.

Entre las recientes agresiones denunciadas era la toma de un terreno dentro del territorio del nuevo ejido Bolón Ajaw, municipio autónoma Comandante Ramona el 20 del enero de este año por un grupo de 57 personas de la OPDDIC del ejido Agua Azul. En un comunicado, La Junta de Buen Gobierno “Corazón del Arco Iris de La Esperanza” Caracol IV Torbellino de nuestras Palabras declaró que “Este grupo de personas entraron en el terreno a las 8 de la mañana con una actitud agresiva llevando en sus manos machetes, listo para usarlos para lastimar a nuestros compañeros bases de apoyo del ejido Bolón Ajaw, además algunas personas llevaban pistolas de calibre 38 y de calibre 22 y 4 personas llevaban radio comunicación…. El propósito de las personas es doble, primero es las cascadas de Bolón Ajaw y segundo propósito es la tierra y sus reservas ecológicas. Como ya conocemos esas personas entreguistas a los planes de Felipe Calderón y de Juan Sabines de querer negociar nuestras riquezas naturales pues ya nos imaginamos que también están hambrientos de dinero sin tomar en cuenta sus consecuencias. Nosotros las bases de apoyo del Municipio autónoma comandanta Ramona no vamos a entregar esas riquezas naturales, como sea lo vamos a defender”.

Otra agresión de la OPDDIC ocurrió el pasado 28 de enero cuando paramilitares de la OPDDIC agredieron a los indígenas tzeltales del predio recuperado Virgen de Dolores en el municipio de Chilón, Chiapas. Los 14 agresores fuertemente armados destruyeron tableros, letreros y el logotipo de la Otra Campaña.

Estas recientes agresiones de la OPPDIC se suman a una larga serie de brutales golpizas, amenazas y hostigamientos a hombres, mujeres y niños zapatistas que han ocurrido desde 2005. El grupo paramilitar, protegido por el ejército y la policía, también ha agredido a observadores y a un representante del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas.

Por otra parte, se hizo eco de la denuncia de La Junta de Buen Gobierno de Garrucha de la represión y despojo en el poblado Laguna de San Pedro por parte del gobierno federal y estatal. El 22 del enero pasado policías, tropas del ejército mexicano, funcionarios del gobierno, camarógrafos y periodistas participaron en el operativo, en el cual las casas y pertenencias de los hombres, mujeres y niños fueron quemados mientras ellos fueron obligados a subir a un helicóptero para ser traslados a Palenque. En un artículo publicado en La Jornada el 31 de enero, Hermann Bellinghausen escribió: “La intención gubernamental explícita es reforestar el área y establecer centros ecoturísticos privados en Montes Azules, dentro de la considerada reserva de la biosfera. El ex gobernador panista de Yucatán Patricio Patrón Laviada, titular de la Profepa, visitó Chiapas en días pasados y acordó dichas acciones con el secretario de Gobierno de la entidad, Noé Castañón León, quien el martes 26 hizo público el acuerdo para reforestar y establecer un centro ecoturístico dentro de Montes Azules”.

También nos solidarizamos con los adherentes de la Otra Campaña del pueblo de Mitzitón, amenazados por el grupo paramilitar “Ejército de Dios, Alas de Águila”. En su comunicado dicen: “El día 21 de julio de 2009, nuestro compañero Aurelio Díaz Hernández fue cobardemente asesinado por el paramilitar Francisco Jiménez Vicente quien dolosamente, con premeditación, alevosía y ventaja lo atropelló….Después de 12 días que obtuvo su libertad el paramilitar Francisco Jiménez Vicente, se han empezado a organizar con más fuerza contra nuestra comunidad. Dicen que tienen fuerza, que el mal gobierno está de su lado y que pueden hacer lo que quieran”.

No sabremos exactamente qué pasó el 7 de febrero en Agua Azul hasta que salga un comunicado zapatista, pero queda claro que la criminalización de los zapatistas en los medios de comunicación ha llegado a un nuevo nivel. Los artículos de Elio Henríquez y Ángeles Mariscal (La Jornada), Hermes Chávez (Milenio) y la redacción de La Razón, es decir el salinista Pablo Hiriart, entre otros, aceptan las mentiras de Alberto López Urbina, vocero de la OPPDIC y administrador del proyecto ecoturístico de Cascadas Agua Azul sin mencionar una sola palabra sobre el papel violento de la OPPDIC en la contrainsurgencia contra los zapatistas. Ahora resulta que el grupo paramilitar es una pobre víctima que sólo busca justicia. Enríquez y Mariscal presentan el secretario de Gobierno de Chiapas, Noé Castañón, como una figura neutral que “insta a las partes en conflicto a establecer una mesa de diálogo para resolver la disputa”. Para Chávez, los zapatistas cometieron una masacre. Y Hiriart llega tan lejos como para decir que Adolfo Moreno Estrada, encontrado muerto después del incidente, “siempre fue pacífico, que sólo se dedicaba a trabajar para mejorar la calidad de vida de su familia, igual que los demás campesinos de su localidad”. Omite decir que el nombre de Moreno Estrada aparece en cada denuncia de violencia hecha por la Junta de Buen Gobierno “Corazón del Arco Iris de La Esperanza” desde 2007.

La concentración terminó con un llamado a poner a un lado nuestras diferencias y fortalecer la solidaridad con las comunidades zapatistas.