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Europa :: 11/04/2006

La movilización popular obliga al Gobierno francés a retirar el CPE. A cambio, subvencionan a la patronal

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Los empresarios franceses necesitan mano de obra barata en esta coyuntura, pero sus representantes en el Gobierno no pudieron implantar el CPE -una parte de la reforma laboral-, por la resistencia popular. Para compensar, otorgan una batería de subsidios a los patrones

El presidente francés, Jacques Chirac, ha anunciado hoy que reemplazará el Contrato de Primer Empleo (CPE) por un nuevo "dispositivo" de cuatro fórmulas que favorecerá la contratación a precio de saldo de trabajadores jóvenes. Sindicatos, estudiantes y la oposición han saludado la medida.

Las cuatro fórmulas se basan fundamentalmente en contratos con salarios muy bajos y fuerte subvención a los empresarios. Esta financiación estatal a la empresa privada ya existía, pero ahora, ante el fracaso en la implantación del CPE, se refuerza considerablemente.

Jacques Chirac ha "decidido sustitiuir el artículo ocho (CPE) de la Ley sobre Igualdad de Oportunidades", ha indicado el Elíseo en un escueto comunicado.

Según la nota, la decisión de reemplazar el CPE ha sido tomada por Chirac sobre una "propuesta" del primer ministro, Dominique de Villepin, y después de "escuchar a los presidentes de los grupos parlamentarios y los responsables de la mayoría", la UMP.

Cuatro medidas

La proposición de ley, que ha sido presentada esta misma mañana, contempla cuatro medidas que amplían y refuerzan subsidios patronales ya existentes, como el contrato para jóvenes en la empresa, el de profesionalización o el de inserción en la vida social (civis), y prolongan el acompañamiento de los contratados.

Las medidas decididas prevén aumentar las primas a los empleadores que contraten a los jóvenes en virtud de esos dispositivos. La factura será de unos 150 millones de euros este año, ya que el nuevo mecanismo se aplicará en el segundo semestre, y el doble en 2007, según ha indicado uno de los parlamentarios de la UMP, Laurent Hénard.

Reacciones

Los sindicatos de trabajadores y organizaciones estudiantiles se reunirán para decidir su reacción al anuncio, aunque algunas organizaciones y partidos políticos ya han adelantado su primera valoración. Así, la secretaria confederal de la CGT, Maryse Dumas, ha calificado la retirada de "éxito".

Por su parte, la presidenta de la Confederación Estudiantil, Julie Coudry, ha pedido a los estudiantes que levanten el bloqueo en las universidades para que "los exámenes se puedan realizar en las mejores condiciones", mientras que el presidente de la Federación de Asociaciones Generales Estudiantiles (FAGE), Jean-Franois Martins, ha celebrado la "muerte" del CPE.

Por su parte, el diputado de los Verdes Jean-Luc Bennahmias ha felicitado a los movimientos juveniles y ha afirmado que el primer ministro "sólo puede hacer una cosa: dimitir".

La medida que sustituirá al CPE contempla cuatro fórmulas de subvenciones a la patronal

Las cuatro fórmulas se basan fundamentalmente en contratos con salarios muy bajos y fuerte subvención a los empresarios. Esta financiación estatal a la empresa privada ya existía, pero ahora, ante el fracaso en la implantación del CPE, se refuerza considerablemente. En resumen, se busca solucionar la necesidad coyuntural de mano de obra barata de la patronal.

La primera fórmula es el Contrato Joven en Empresa, de carácter indefinido y dirigido al sector privado, del que se han firmado 300.000 desde su creación en 2002. Este contrato incluye una subvención estatal que es ahora de entre 150 a 300 euros por persona y que aumentará a 400 euros durante el primer año de vigencia y a 200 euros en el segundo.

El segundo elemento del dispositivo es el Contrato de Inserción en la Vida Social (CIVIS), dirigido a jóvenes a los que se ofrecen empleos en el sector público. Hasta ahora se han firmado 160.000 CIVIS, modalidad que se pretende relanzar con una adaptación que prevé una primera fase de tres meses para establecer un resumen de competencias, tras lo que seguirán periodos de formación o de trabajo con seguimiento de un tutor durante el primer año de empleo.

La tercera fórmula es el Contrato de Profesionalización, dirigido a jóvenes de 16 a 26 años sin cualificación y en vigor desde finales de 2004, que establece una alternancia entre la formación y el desempeño de un trabajo. Según el nuevo dispositivo, las empresas que hagan indefinido este Contrato de Profesionalización recibirán 200 euros al mes durante el primera año y 100 euros durante el segundo.

Por último, el Gobierno pretende abordar el problema de las 300.000 ofertas de empleo que no pueden cubrirse en el Estado francés por falta de personal adecuado. Su objetivo a ese respecto es organizar prácticas para 50.000 jóvenes que permitan su integración en esos oficios en los que la mano de obra escasea. Se sustenta en el contrato de aprendizaje, un contrato temporal de uno a tres años de duración que alterna la formación en la empresa y en el centro educativo.

Con información de Agencias

 

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