[Barcelona]: El Sindicato de Estudiantes avala la teoría mediática de la "reyerta entre bandas"

Asombrados por la cantidad de espacio que le dedican los medios, sobre todo los cercanos al PSOE, a los dirigentes del SU, leemos:

Unos 600 estudiantes, según la Guardia Urbana, se manifestaron ayer en Barcelona contra la violencia "fascista" con motivo de la muerte en Madrid de un joven de 16 años cuando se dirigía a una manifestación antifascista el 11 de noviembre. [Instrucciones a los redactores: poner siempre fascista entre comillas, y no usar jamás la palabra asesinato]

La concentración había sido convocada por el Sindicato de Estudiantes, cuyo secretario general en Catalunya, Aniol Santo, ha explicado que la marcha "responde a la escalada de violencia fascista", pero también a la "impunidad policial y judicial" que tienen estas agresiones.

Aniol consideró un éxito la protesta, que, según la organización, reunió a unos 2.000 estudiantes catalanes que protestaron "a pesar de la campaña de miedo" fomentada por "los violentos" [sin especificar si se refería a los de ultraderecha o a los antifascistas].

La marcha trascurrió desde la plaza Universitat hasta la vía Laietana [por una vez y sin que sirva de precedente, sin represión policial].

Antes de comenzar la marcha los jóvenes han votado a mano alzada si preferían una manifestación pacífica o violenta. "El resultado ha sido absolutamente aplastante a favor de una manifestación pacífica", ha dicho Santo.

A pesar de que han ganado los votos pacíficos, Santo ha reconocido que cuatro estudiantes han votado en contra, aunque ha dicho que podría tratarse de "policías disfrazados de secreta" que querían introducir un "provocador".

En otra clara alusión a la consigna que lanzan los medios burgueses y los políticos de que los antifascistas son bandas violentas, el dirigente cercano al PSOE agregó "La extrema derecha, los gobiernos y los violentos son los únicos que ganan cuando hay peleas".

De esa forma se intenta avalar la teoría de los dos demonios: De un lado la ultraderecha, del otro los "violentos" antifascistas, y en el medio la ciudadanía desamparada, los estudiantes pacíficos. Es parte de un esfuerzo desesperado del gobierno por terminar con el protagonismo que están teniendo las organizaciones antifascistas.