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Nacionales E.Herria :: 20/01/2014

34 años después exigen justicia para 4 asesinados por los fascistas en Alonsotegi

La Haine - Euskal Herria
Un grupo paramilitar fascista, colocó una bomba en el pueblo bizkaitarra de Alonsotegi que ocasionó 4 muertes. Ni siquiera se ha investigado

Familiares de las víctimas registradas en el atentado que sufrió el bar Aldana de Alonsotegi en 1980 reclaman el total esclarecimiento de este episodio, que costó la vida a cuatro personas: Liborio Arana, Manuel Santacoloma y el matrimonio formado por Pacífico Fica y Mari Paz Ariño. Además de los cuatro fallecidos, el atentado, que fue reivindicado por un supuesto grupo de la extrema derecha -Grupos Armados Españoles- , dejó una decena de heridos.

Cartel que anuncia la ofrenda floral que se hará este lunes 20 en el lugar del atentado terrorista ultra

Los familiares de las víctimas del bar Aldana realizaron ayer una concentración en Alonsotegi, en la que se dio lectura del escrito enviado a Jonan Fernández, , mediante el que se le pide que adopte las medidas que considere oportunas para el esclarecimiento del atentado y "en su caso, solicite por parte de la Ertzaintza una investigación que permita reconstruir la verdad sobre el atentado". Entre los asistentes se encontraban María Eugenia Bideguren, viuda de Liborio Arana; Arantza Fica Ariño, hija del matrimonio asesinado; Mari Carmen Coteron, herida en el atentado junto a su marido Andoni Mendoza, a quien tuvieron que amputarle una pierna; y José Ángel González Arrieta, propietario del bar Aldana y que resultó igualmente herido.

Iban Arana, nieto de Liborio, y los nietos del dueño del bar Aldana, Iker y Goiuri Delgado, fueron los encargados de leer el escrito en el que se señala que la propietaria del bar Aldana, Garbiñe Zarate Camino, después del atentado, y durante años, siguió recibiendo amenazas. Aseguran, asimismo, que nunca fueron informados de la investigación que abrió el entonces Gobierno Civil de Bizkaia y que el en aquellos momentos director general de la Policía, José Saiz, se comprometió a "asumir la responsabilidad de adoptar cuantas medidas policiales y de actuación antiterrorista sean necesarias para apoyar las instituciones democráticas y aislar a los asesinos que no dudan en emplear la violencia contra personas inocentes". Pese a aquella declaración de principios, 34 años después sigue sin esclarecerse la identidad de los autores del atentado.

En el escrito, los familiares de las víctimas del bar Aldana describen que meses después del atentado desde fuentes cercanas a ámbitos judiciales se conoció una pista que apuntaba a mandos intermedios de la Comisaría de Policía de Barakaldo como autores de la colocación del artefacto que podría haber contenido seis kilogramos de goma 2.

Inciden, asimismo, que años después, con motivo de los intentos de esclarecer los atentados cometidos por los GAL, fuentes policiales confidenciales y anónimas volvieron a situar en la Comisaría de Policía de Barakaldo a los autores del atentado de Alonsotegi. Pese a que todos los caminos apuntaban en una misma dirección a la hora de encontrar a los autores de la masacre, la Comisaría de Policía de Barakaldo, los familiares de las víctimas del bar Aldana señalan que nunca se dieron pasos reales para el esclarecimiento de aquel acto terrorista y para la búsqueda de los responsables del mismo.

Los familiares de las víctimas del bar Aldana, "y desde el conocimiento de la verdad", instan a que se pongan todos los medios para aclarar el atentado.

 

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