Agencias/La Haine. 14/04/02. El ejército chavista y el levantamiento popular han tumbado el golpe militar pro-imperialista en 48 horas. El vicepresidente del Gobierno de Hugo Chávez, Diosdado Cabello, ha jurado en el Palacio de Miraflores como nuevo presidente de la República hasta el regreso de Chávez, mientras militares 'chavistas' detenían en Fuerte Tiunga al golpista y líder de la patronal venezolana, Pedro Carmona, que presentó poco antes su dimisión. Los ministros reunidos en la sede presidencial han anunciado la pronta "liberación" de Chávez y "el restablecimiento del orden constitucional".

El vicepresidente del Gobierno de Hugo Chávez, Diosdado Cabello, ha jurado en el Palacio de Miraflores de Caracas como nuevo presidente de la República, mientras militares 'chavistas' detenían en Fuerte Tiunga al golpista y líder de la patronal venezolana, Pedro Carmona, quien poco antes restituyó la Asamblea Nacional bolivariana -disuelta hacía pocas horas- junto con el resto de poderes públicos, y presentó su dimisión. Los ministros reunidos en la sede presidencial han anunciado la pronta "liberación" de Chávez y "el restablecimiento del orden constitucional". Decenas de miles de personas se han lanzado a las calles para celebrar la rápida caída del golpe militar.

Las fuerzas leales a Chávez dieron un ultimátum a las "fuerzas golpistas" para que liberaran al mandatario venezolano antes de las 22:00 horas (hora local de Caracas), o 'procederemos militarmente".

Según anunció el que se autoproclamó ministro de Defensa del golpista Pedro Carmona, el vicealmirante Héctor Ramírez, el general en jefe Lucas Rincón ha asumido de nuevo su cargo de jefe de las Fuerzas Armadas de Venezuela.

Nueve personas murieron y otras 48 resultaron heridas disparos de policías y militares golpistas que precedieron frenar en Caracas el levantamiento popular. Todas las víctimas recibieron impactos de bala. Las víctimas dijeron haber sido agredidas durante las manifestaciones de apoyo a Chávez en las cercanías del Palacio de Miraflores.

Carmona fue evacuado después del palacio de Miraflores rodeado, según el diario cubano Granma, por 100.000 simpatizantes de Hugo Chávez, y fue trasladado a las instalaciones militares de Fuerte Tiuna.

La sede presidencial fue entonces ocupada por los ministros del ex mandatario y por el presidente de la Asamblea Nacional restituida, William Lara. "Somos miles, incluidos muchos militares, todos fieles a Hugo Chávez, los que ocupamos los locales de la Presidencia", explicó el funcionario.

La ex ministra de Trabajo María Cristina Iglesias, el diputado Juan Barreto, el diputado Vladimir Villegas y el ex director de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) Jesse Chacón aparecieron en el canal de televisión estatal, Venezolana de Televisión, conocido como Canal 8, para informar de que el Gobierno de Chávez está tomando el control del país.

"Estamos seguros de que en las próximas horas, y cuidado si no en los próximos minutos, Chávez estará en libertad y presidiendo el Consejo de Ministros", destacó la ex ministra. De hecho, una delegación de fieles va a viajar a la isla de la Orchila, en el Caribe, donde se encuentra el ex presidente, para trasladarle a Caracas.

María Cristina Iglesias aseguró también que la Fuerza Armada Nacional está apegada a la institucionalidad, "que tiene que ver con garantizar la Constitución y la Ley".

Levantamiento popular desde los barrios al centro de Caracas

«Gente de todos los barrios están caminando hacia el centro para pedir que nos muestren la renuncia de Chávez», aseguraba uno de los manifestantes. «En caso de su renuncia (de Chávez) que aún no conocemos y ni hemos visto, pedimos que por favor se haga a la luz pública» coincidió el responsable militar con los manifestantes.

María Gabriela Chávez, hija del presidente, aseguró que «tenemos información de muy buenas fuentes de que ha sido trasladado a la Orquila, que es una pequeña isla, y ha sido vejado, lo han tratado mal, y eso es lo único que sabemos».

Esta manifestación era el colofón de una jornada que amaneció con protestas crecientes, tanto en Caracas como en otras ciudades del país contra el golpe militar, protestas que fueron reprimidas con al menos un muerto y dos heridos de bala por la Policía y el Ejército, que detenía a ministros, diputados y militantes bolivarianos. Varias ONG denunciaron la represión y la práctica de redadas masivas por parte del poder golpista.

En medio de estas protestas, que hacían recordar el comienzo del estallido popular que, bautizado como el Caracazo, acabó en febrero de 1989 con centenares de muertos y prisioneros, fuentes locales anunciaron desde la ciudad de Maracay, 120 kilómetros al oeste de Caracas, que el acuartelamiento de la brigada de Paracaidistas, comandada por el general del Ejército Raúl Baduel, se mantenía leal al presidente legítimo Chávez. Este recinto militar, sede principal de la Fuerza Aérea venezolana en el estado de Aragua, alberga a 2.000 soldados con alta provisión de armamento, explicaron estas fuentes.

Chávez, en una isla del Caribe

Por su parte, el diputado Juan Barreto pidió al alcalde de Caracas, Alfredo Peña, uno de los más enconados enemigos de Chávez, que retirara a la Policía golpista de las calles, pues está reprimiendo a la población.

"Le pedimos a Carmona que reflexione, que lo piense, y a los medios que abran los canales e informen sobre la insurrección pacífica que está pidiendo la vuelta de los poderes electos democráticamente", invitó el diputado 'chavista'.

Barreto subrayó que Chávez no quiere irse a Cuba ni a otro sitio, sino volver a la Presidencia, y llamó a la ciudadanía a que "siga en las calles apoyando a Chávez", y al alto mando militar a que se apegue a la Constitución de 1999.