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Masivas movilizaciones en 40 ciudades del sur santafesino

Durante más de cuatro horas, los bancos de Casilda fueron atacados por manifestantes

Agencias/La Haine. 17/01/02.- La ciudad de Casilda fue el martes escenario de fuertes enfrentamientos en el marco de una protesta masiva contra el sistema financiero y la política de hambre del gobierno de Duhalde, que abarcó alrededor de 40 ciudades y pueblos del sur santafesino. De nuevo los manifestantes respondieron al ninguneo de la clase político-empresarial con ataques contra sucursales bancarias, verdaderos responsables de la pobreza en Argentina.

Ubicada a 50 kilómetros al sudoeste de Rosario, Casilda vivió cuatro horas de masivas protestas, que según fuentes oficiales del país, habían sido decididas el domingo en San José de la Esquina por una asamblea impulsada por la Asociación de Entidades Empresarias del Sur Santafesino, operarios de la industria frigorífica, productores agropecuarios, empresarios, comerciantes, numerosos vecinos en bicicletas, un sector de la Corriente Clasista y Combativa, el Movimiento de la Defensa de la Vivienda Unica, desocupados y delegaciones de localidades vecinas.

La gente se concentró en la avenida Buenos Aires y se encolumnó cubriendo varias cuadras, superando las 8 mil personas.

El color lo dieron paisanos a caballo y "La murga de los desocupados", que se movilizó en una vieja pick up roja que recorrió el centro, precediendo la marcha un gran cartel de fondo rojo con la inscripción "Remate. Basta de usura".

La columna se detuvo frente al Banco Galicia, que fue decorado con huevos y piedras. Se repitió la situación en el Banco Credicoop, frente a la plaza De la Fuente mientras la multitud gritaba "Se va a acabar esa costumbre de afanar".

El clima de agitación fue aumentando y estalló ante el Banco Nación, ubicado próximo al edificio de la Municipalidad. Las piedras destruyeron la puerta de blin dex de la sucursal y las ventanas.

La columna atacó luego al Bisel, pese a las desesperadas exigencias de la dirigencia empresaria de que cesaran "los actos de violencia". A esa altura se habían sumado varias camionetas y nueve deteriorados tractores.

Frente al Bisel se registraron duros incidentes con policías antimotines que dispararon balas de goma y gases lacrimógenos. Hubo 14 detenciones y cuatro heridos. Los manifestantes se reagruparon ante el Nuevo Banco de Santa Fe, destrozando el frente vidriado.

Numerosos grupos retornaron al Credicoop destrozando el frente, un cajero automático y todo el hall de ingreso. Lo mismo sucedió con el Galicia -remodelado hace seis meses con el dinero del pueblo- donde destrozaron dos cajeros automáticos y el acceso. Después la ira se trasladó a la delegación de la Empresa Provincial de Energía, donde rompieron los vidrios y el mobiliario fue quemado en la calle.

Luego fue el turno de una filial de Telecom, donde se generó un principio de incendio. En la sede de la AFIP rompieron el mobiliario y se quemaron archivos. Igual situación se dio en la Administración Provincial de Impuestos, donde el fuego se extendió a un edificio lindero y tuvo que ser sofocado por los bomberos.

Finalmente los ataques se trasladaron al supermercado El Solar, cuyas vidrieras fueron rotas pero no hubo intento de saqueo. En febrero del año 1971 se produjo el "Casildazo", cuando la población, como consecuencia de las graves inundaciones que dejaron a la población sin el menor amparo del gobierno, destrozó la terminal de ómnibus, parte del municipio y la iglesia San Pedro. Nunca antes los casildenses habían vivido una situación de lucha como la de ayer. Pasadas las 14 la calma volvió a la ciudad.

Manifestaciones en otras ciudades

Protestas similares, se produjeron también en las localidades santafesinas de Armstrong, Cañada de Gómez, Firmat y Chabas.

En Jujuy, en el norte del país, oficinas de al menos tres bancos fueron destruidas durante una manifestación de trabajadores estatales para reclamar el pago de sueldos adeudados por las autoridades provinciales y protestar contra la pobreza del país.

Los bancos afectados han sido el Macro, el BankBoston, el Citibank y el Banco Hipotecario de la capital provincial, cuyos vidrios fueron rotos por manifestantes indignados, que en algunos casos entraron en las sedes bancarias y destruyeron parte del mobiliario.

En la provincia de Córdoba, comerciantes y propietarios de pequeñas empresas realizaron un ruidoso cacerolazo en el centro de la ciudad de Córdoba, capital de la provincia argentina del mismo nombre, contra la misma situación insostenible que padecen.

"Devuelvan la plata que se llevaron", gritaron los manifestantes, quienes reclamaron la liberación total del dinero robado por el gobierno durante tantos años. La protesta, convocada por la Asociación de Pequeñas y Medianas Empreasas (Apyme), se llevó a cabo frente a una sucursal del banco Citybank.

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