ASUNCIÓN.Agencias/La Haine. 16/07/02.- Dos personas han fallecido durante la violenta repersión llevada a cabo este lunes por fuerzas conjuntas de policías y militares en Ciudad del Este y en la capital de Paraguay. Se arremetió con inusitada saña contra manifestantes que pedían simultáneamente en varios puntos del país la renuncia del presidente del gobierno González Macchi. Al menos dos personas murieron, hay un centenar de heridos, muchos de ellos de bala, y casi 200 detenidos. La represión fue especialmente cruenta en Ciudad del Este, Caaguazú, Itá, Piribebuy y Asunción. El Ejecutivo puso en vigencia el estado de excepción en toda la República y ordenó la salida a las calles de las Fuerzas Armadas. La medida, que debe ser refrendada por el Congreso, le permite hacer arrestos y prohibir reuniones públicas. Las protestas son contra la ilegitimidad, la corrupción y los acuciantes problemas socioeconómicos, según informa el diario paraguayo ABC Color.

Las dos víctimas presentaban heridas por arma de fuego en los enfrentamientos registrados entre las fuerzas represivas y miles de manifestantes opuestos a la política de hambre del Gobierno en el puente internacional de La Amistad, que une Ciudad del Este con Foz de Iguazú (Brasil). Las protestas han provocado hasta el momento además 50 heridos, tres de ellos de bala, y más de 100 detenidos, la mayoría en Ciudad del Este y en una de las entradas de Asunción, según las emisoras de radio locales. Así mismo se presentaron cierres de rutas en al menos 10 puntos neurálgicos del país.

Los choques violentos se producen después de que el Gobierno declarase el estado de excepción en todo el país por espacio de cinco días y decretase el acuartelamiento de las Fuerzas Armadas para "restablecer el orden constitucional".

La última vez que fue declarado el estado de excepción en el país, por treinta días, fue durante la intentona golpista del 18 de mayo del 2000, cuando un grupo de militares y civiles tomó el control de dos unidades militares y una comandancia policial.

El conflicto estalló cuando el Gobierno trató de imponer su programa de privatizaciones tras varias suspensiones de la venta de la empresa de telecomunicaciones Copaco. González Macchi fue acusado de eludir en el trámite a la Notaría General del Gobierno y de hacer pagar 500.000 dólares a un notario amigo suyo para redactar la escritura de la empresa. Según la oposición, sería entregada en concesión por 200 millones de dólares, cuando los analistas calculan que vale 600 millones. Las movilizaciones populares obligaron a postergar también la venta de la empresa ESSAP, de agua potable.

Miles de campesinos amenazan con tomar la capital

González Macchi anunció el pasado junio la suspensión del proceso de privatizaciones en un intento de calmar las protestas de los campesinos, que se alzaron contra el plan y que obligaron al Congreso a votar la derogación del la Ley de Reforma del Estado en un intento de salvar al Gobierno. Los incidentes provocaron entonces un muerto y decenas de heridos. Según varias fuentes, más de 6.000 campesinos amenazaban con tomar la capital.