El líder Aucán Huilcamán critica el accionar de la iglesia católica hacia los mapuche

Extractos del texto del líder mapuche fechado el 12 de julio, en el cual critica el papel histórico de la iglesia católica en el trato a los mapuche.

Estimado señor Jorge Pinto:

Quisiera valorar su decisión de participar en la mesa de diálogo constituida con fecha 7 de julio de 2016 en Temuco, en su calidad de historiador, a raíz de las tensiones y controversias que subsisten como consecuencia de la situación de La Araucanía y en particular de la situación del Pueblo Mapuche (…).

Al mismo tiempo lamento que la mesa de diálogo no tenga una agenda precisa y clara, lo que indica que tendrá un futuro incierto sumado a los conflictos de intereses que subsisten entre varios de sus integrantes. La ausencia de una agenda temática ha sido la estrategia permanente de todos los gobiernos posdictadura militar, tanto en la era de la Concertación como en el gobierno del ex presidente Sebastián Piñera (…). Sin embargo, una mesa de diálogo con meridiana certeza y para el establecimiento de recomendaciones útiles, adecuadas y aceptables requiere de un mandato institucional que vuestra mesa de diálogo no tiene y del mismo modo con insumos que podrían guiar un diálogo fructífero y de buena fe (…).

Como Ud. sabe, la Iglesia Católica participó determinantemente en el proceso de expansión Española en América y lo que hoy es Chile y que derivó en el sometimiento del Pueblo Mapuche (…).

La Iglesia Católica, en su acompañamiento al Ejército de Chile en la Pacificación de La Araucanía, efectuó variados actos contrarios al derecho a la paz y a la vida de los Mapuche. Sólo citaré uno de ellos: El Parlamento celebrado en Angol el año 1879, preparado y ejecutado por Fray Estanislao María Leonetti para hacer creer al gobierno central (…) que los Mapuche aceptaban renunciar a sus derechos y someterse a la obediencia del Estado de Chile (…). Se adoptó un documento de 11 puntos, elaborado unilateral y perversamente por Fray Estanislao María Leonetti; sin embargo, los Mapuche nunca participaron de dicho texto y el presunto incumplimiento de parte de los Mapuche terminó con dos grandes consecuencias lamentables para los Mapuche y que hoy son parte de las causas de las tensiones que vuestra mesa de diálogo intenta remediar.

La primera, el despliegue e instalación de nuevas fuerzas y unidades militares en el Wallmapuche (…); la segunda, la aplicación de la política de tierras arrasadas, destrucción total de las siembras, quitándoles la alimentación y debilitar a los Mapuche, llevándolos a un estado de hambruna y seguidamente materializando la ocupación, confiscación y tomas de las tierras Mapuche y sus recursos. Esa estrategia (…) constituye un crimen de lesa humanidad pendiente (…).

La Iglesia Católica no es neutral, como es de vuestro conocimiento.
Esta institución tiene en su posesión tierras que legítimamente pertenecen al Pueblo Mapuche, propiedades adquiridas como consecuencia del despojo territorial de que ha sido objeto el Pueblo Mapuche. (…) En la actualidad, gran parte de los derechos de agua de La Araucanía está inscrita legalmente a su favor (…).

Me he preguntado cuál es la razón para que la Universidad de la Frontera participe de una mesa de diálogo con estas características, y paralelamente entiendo también que requieren de recursos económicos para su funcionamiento, pero no es razón para acompañar el denominado proceso constituyente de consulta con el Pueblo Mapuche que lamentablemente no tiene certeza en sus resultados. Las incertidumbres no son antojadizas ni precipitadas de mi parte, y mis razones se las expongo brevemente: A.- Han sucedido 200 años de historia y 135 de la denominada Pacificación de La Araucanía, y el Estado Chileno ha mantenido invariable su doctrina de la negación del Pueblo Mapuche y sus derechos, y no hay certeza de que ahora cambiará. B.- En América Latina y el Caribe hay una experiencia de 40 años sobre reconocimientos constitucionales y no se han subsanado la relaciones de los Estados y Pueblos Indígenas. C.- Incluso si se pretendiera adornar con conceptos de plurinacionalidad, multiculturalidad, interculturalidad entre otros, tenemos a Bolivia y Ecuador que se han autodefinido constitucionalmente como Estados Plurinacionales y la situación no da luces de cambios significativos (…). D.- Para no creer en el proceso constituyente chileno tenemos en cuenta que todos los proyectos de reconocimientos constitucionales enviados al Parlamento, tanto por el Ejecutivo e iniciativas parlamentarias, todos y sin excepción se han caracterizado y han tenido por objeto diluir, restringir y limitar los derechos de los pueblos indígenas, y en particular el de los Mapuche. E.- La única certeza que observo y es que se producirá una suma de reuniones, sesiones y actos publicitarios, pero no hay certeza para un reconocimiento aceptable para el Pueblo Mapuche y sus derechos. Por ello, es muy oportuno subrayar que el derecho internacional para resolver estas y otras situaciones estipuló el reconocimiento del derecho a la libre determinación de los pueblos indígenas, uno de los derechos humanos más altos que gozan los pueblos; y en este sentido, siendo los Mapuche titulares del derecho a la libre determinación, nos hemos propuesto ejercer este derecho en toda su forma, y desterrar el colonialismo y domesticación de que somos objeto de parte del Estado Chileno y otras instituciones que lo acompañan.

Teniendo en cuenta que los Mapuche somos titulares del derecho a la libre determinación y en su forma concreta instaurar un gobierno al amparo del derecho internacional, hemos tomado la decisión de efectuar una Sesión Plenaria de Alto Nivel para una Asamblea Constituyente Mapuche en octubre 2016, del cual desde ya aprovecho de extender la invitación (…).

Finalmente, subrayo que el derecho a la libre determinación guiará nuestro accionar para determinar nuestro futuro inmediato y ejerceremos el consentimiento previo libre e informado. Manifestamos que no consentimos en los actos e intenciones foráneas que buscan perpetuar la doctrina de la domesticación y el colonialismo con el Pueblo Mapuche y sus derechos.