Los movimientos sociales preparan una ofensiva contra el eventual Gobierno de Michel Temer

Considerando improbable que el Senado revierta su intención de aprobar el impeachment de la presidenta Dilma Rousseff, el Movimiento de los Trabajadores sin Techo (MTST) anunció que la próxima semana encarará una ofensiva con el objeto de “resistir el golpe en curso en el país y la defensa de los derechos y de los programas sociales, amenazados de ser suspendidos por un eventual gobierno de Temer”. El Movimiento prepara bloquear autopistas y avenidas, ocupación y paralización laboral en decenas de ciudades brasileñas, en cualquier momento de la semana próxima.

El informe fue publicado por la Red Brasil Actual (RBA) el pasado 20 de abril. “A pesar de que las manifestaciones en las calles siguen aumentando, la Cámara de Diputados se inclinó por el impeachment. Creemos que lo mismo va a suceder en el Senado. Lo que es necesario tener claro es que el Gobierno de Temer no va a contar con el apoyo popular y no le será fácil que aprueben su proyecto” dijo el coordinador estatal del MTST de San Pablo, Josué Rocha.

El coordinador del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Joao Pedro Stédile, entiende que también es momento de pensar en el futuro “Ahora debemos detener el golpe y hacer inviable un gobierno de Temer”, afirmó el líder de los Sin Tierra en una entrevista del programa Espacio Público de la TV brasileña. Los referentes de Brasil Popular y Pueblo Sin Miedo se han reunido para definir qué harán el día 1 de mayo y en otras movilizaciones.

Stédile, mientras tanto, cree que todavía es posible revertir en el Senado la decisión del impeachment y espera que ello derive en un gobierno totalmente diferente en el Planalto [i] . “Si no conseguimos detener el impeachment en el Senado el gobierno de Dilma de 2014 y 2015 está terminado. Tendremos otro gobierno, coordinado por Lula, aunque los movimientos populares nos la jugamos a que sea Lula-3, porque es él quién va a tener que coordinar, reformar los ministerios y adoptar otra política económica”.

Descartó incluso la propuesta de llevar a cabo nuevas elecciones entre las reivindicaciones del movimiento. “Lo que la burguesía brasileña quiere no es cambiar de presidente sino instalar un programa neoliberal que le permita recuperar sus niveles de lucro y salir de su propia crisis. El pueblo, si se me permite la expresión, que se joda”.

¿Qué arma tiene la clase trabajadora en este momento? Decir a la burguesía “oiga no aceptamos un plan neoliberal, no aceptamos perder nuestros derechos y no aceptamos perder nuestros salarios. Para que se les pueda decir eso a los golpistas es necesario paralizar el país”, agrega.

El Sin Tierra consideró que todavía se está evaluando cuáles serían las categorías que estarían en condiciones de parar, a causa del aumento del desempleo, “Creo que hay muchos sindicatos que tienen bases organizadas en las fábricas, como el ABC paulista en el valle del Paraiba. En Río de Janeiro los petroleros podrían parar a Petrobras. En el sector agrícola nosotros podríamos parar, en las calles, el transporte de mercaderías” afirmó.

Nota: [i] Sede del Poder Ejecutivo del Gobierno brasileño.

 http://www.ihu.unisinos.br/noticias/553981. Traducido del portugués para Rebelión por Susana Merino