lahaine.org
Mundo, James Petras :: 23/10/2015

El de 1976 en Argentina no fue un golpe militar sino un golpe capitalista

James Petras - La Haine
El 80% o más de los 30.000 desaparecidos eran obreros, no guerrilleros ni simpatizantes de la izquierda armada; eran trabajadores

Análisis de James Petras en CX36, 19 de octubre de 2015. Escuchar aquí: http://www.ivoox.com/analisis-james-petras-cx36-audios-mp3_rf_9076419_1.html

Efraín Chury Iribarne: Vamos a comenzar por lo que está pasando en Medio Oriente, particularmente por el objetivo de Israel de terminar con Palestina.

JP: En realidad lo que está pasando en Medio Oriente es la continuación del pasado, con algún incremento en los combates contra la presencia norteamericana. Es muy complicado, hay luchas entre varios grupos y subgrupos.

Lo que debemos entender es que el grupo ISIS y el grupo suni que recibe apoyo de arabia Saudita, están combatiendo al gobierno Iraqui títere de EEUU por un lado, y por otro está tratando de tumbar al gobierno de Siria. Asimismo tenemos a EEUU que por un lado dice combatir a ISIS y por otro está ayudándolo para combatir al gobierno de Bashar Al Asad.

Más allá de estos conflictos en Irak y Siria, tenemos la lucha de los palestinos que están sufriendo muchos asesinatos, incluso los colonos israelíes están atacando a los palestinos, quemando sus casas y sitios religiosos; y los palestinos, con pocas armas, tratan de contra atacar. Mientras que los medios de comunicación simplemente enfatizan las acciones ‘violentas’ de los palestinos y minimizan las atrocidades de Israel. Debemos saber que la proporción de heridos y muertos es de diez veces, es decir por cada israelí herido o muerto hay diez palestinos que sufren algo similar o peor. Y entre los palestinos, hay docenas de casas destruidas por Israel, porque si cualquier miembro de una familia está involucrado en acciones contra Israel, los israelitas destruyen su casa y dejan a la familia entera en la calle.

Resulta que la prensa europea llora el conflicto pero no levanta ni una mano para paralizar las acciones terroristas de Israel. Tenemos todas las posibilidades de terminar este conflicto si Europa declarara el boicot a los productos israelíes, si EEUU deja de financiar y armar a Israel; así terminaría el conflicto. Porque Israel tiene la fuerza que tiene porque los comerciantes europeos y estadounidenses siguen haciendo negocios con Israel. Eso es producto del a influencia que tienen los sionistas en cada región. En los EEUU son muy poderosos, incluso tienen representantes en el gobierno con ciudadanía dual, hay muchos altos funcionarios norteamericanos que son ciudadanos de EEUU y de Israel, y ellos manejan la política hacia Medio Oriente.

Entonces, no puede haber ninguna paz en el horizonte ni término de conflicto. Debemos anticipar más refugiados, debemos entender que Europa está vinculada directamente con los conflictos allí, a partir de su presencia militar en la región. Lo mismo sucede con EEUU. Hablan de acuerdos de paz pero en realidad fomentan los conflictos.

Finalmente debemos tener claro que la presencia de Rusia es un gran salto adelante para las fuerzas anti sectarias, anti derechistas y anti presencia norteamericana como fuerza dominante. Rusia está apoyando a Bashar Al Asad en la lucha contra los grupos extremistas de ISIS, tratando de crear un ambiente para una negociación y tal vez, entre otras cosas, una elección en que el pueblo pueda decidir quién va a gobernar. Pero por el momento EEUU y Europa no quieren entrar en ese arreglo con Rusia y buscan todavía crear el pánico, fomentando la violencia, y no hay forma de solucionar el problema en ese camino.

EChI: ¿Qué pasa en EEUU hacia la próxima elección?

JP: Es como un disco roto. No hay ningún gran tema. Los únicos que reciben publicidad son los dos grandes polos conflictivos, Donald Trump por los republicanos y Bernie Sanders por el Partido Demócrata. Ambas partes están usando mucha demagogia, llamando a los otros candidatos derechistas, uno criticando Wall Street y el otro criticando todo, pero a su manera. Y la campaña sigue siendo de poco interés para la mayoría de la gente porque no se sienten representados.

En un caso, Trump tiene el apoyo plural de los republicanos por sus declaraciones contra los inmigrantes; y Sanders tiene respaldo sindical por sus denuncias a la política pro Wall Street. Pero al final de cuentas, cuando las Primarias terminan y los candidatos están decididos, ni la izquierda ni la derecha extrema van a tener a sus propios voceros; va a quedar todo igual porque aquí no hay ningún partido ni candidato consecuente.

Por ejemplo, el candidato demócrata Bernie Sanders critica la riqueza excesiva pero no quiere criticar al capitalismo; habla de paz y justicia pero apoya todas las guerras imperialistas. Es un candidato populista pro imperialista. Del otro lado Trump ataca a los inmigrantes, respalda al capitalismo salvaje, pero declara que va a aceptar un plan nacional de Salud. Es una mezcla de todo para nada.

Hay que ver las cosas más de cerca para decir que, como siempre, las elecciones estadounidenses son entre uno y otro vocero buscando el apoyo de Wall Street, del gran capital financiero vinculado con el militarismo en el exterior. Hay poco de progresistas en estos candidatos que tenemos.

EChI: ¿Cómo se ve Brasil que está envuelto en esa ola de corrupción indetenible?

JP: Es claro que Dilma Rousseff ha optado por el gran capital financiero. Últimamente ella decidió que prefiere a Joaquim Levi, el exponente de la política de libre mercado y la austeridad. Lo llaman Jack Levi aquí en Wall Street, es muy amigo de las grandes casas financieras, como Goldman Sachs y otros.

Y cuando él le impone la política financiera a Rousseff, ella simplemente lo reafirma. Y cuando el presidente del Partido de los Trabajadores (PT), Rui Falcão, dice que deben cambiar el camino ella afirma que prefiere al Ministro de Hacienda porque ella está en esa onda. Cuando la izquierda del PT la critica y busca una alternativa con Valter Pomar, ella opta por Levi.

En otras palabras, los progresistas que trabajaban en el PT no tienen ninguna opción, son cautivos de la línea de apoyo crítico dentro del PT. Lo mismo pasa con Joao Pedro Stédile, del Movimiento Sin Tierra, que por muchos años siguió metido en el PT y ahora, cuando el PT adopta políticas completamente en contra de los intereses de la reforma agraria, el MST no tiene ninguna otra opción política. Y utilizan el miedo a un golpe de Estado, que no está en el horizonte, como pretexto para justificar el apoyo a Dilma, a pesar que adopta políticas de extrema derecha.

Y Dilma está cayendo entre las dos sillas. Porque los capitalistas que ella está tratando de atraer no la quieren, buscan sus propios voceros. Entonces la orientación hacia la austeridad no cosecha ningún apoyo de la derecha ni del gran capital.

Por otro lado, las medidas de austeridad perjudican su base electoral entre los trabajadores y la gente pobre. Ni gana el apoyo nuevo de los capitales ni retiene el apoyo de sus simpatizantes tradicionales, populares. Entonces no le queda ningún apoyo. Y en las últimas encuestas salió con un 8 o 9% de popularidad. O sea, es un cadáver esperando salir de la Presidencia.

EChI: Bien Petras, te dejamos los minutos finales para que nos comentes en que otros temas estás trabajando.

JP: Hay algunas noticias interesantes que quiero mencionar. El Banco Central de Argentina abrió sus archivos y muestran que muchos de los capitalistas argentinos tenían listas de trabajadores, sindicalistas, delegados de sus empresas, que entregaban a la dictadura de 1976. Es decir, exigieron la purga y la desaparición de las víctimas a la Junta Militar.

Esto es importante, porque muchas veces hablamos del golpe militar pero el contenido del golpe fue eminentemente capitalista. Y como los archivos del Banco Central revelan, una de las prioridades de los capitalistas era desaparecer a los militantes sindicales. Muestran que el 80% o más de los 30.000 desaparecidos eran obreros, no guerrilleros ni simpatizantes de la izquierda armada; eran trabajadores. Eso muestra que no fue un golpe militar, sino que fue un golpe capitalista. En primera instancia, un golpe para liquidar, asesinar, a los militantes de las fábricas, que estaban creando obstáculos a las ganancias del capital. Y segundo, el golpe tuvo que ver con la lucha entre sectores liberales del capitalismo y el sector progresista burgués, nacionalista, que apoyaban las medidas estatistas.

Entonces podríamos decir dos cosas sobre los golpes de Estado, por lo menos en países capitalistas en América Latina: El terror no es estatal, el terror viene de los capitalistas que querían eliminar a la oposición que existía entre los trabajadores. En segundo lugar, el golpe de Estado no fue militar, fue capitalista, porque los objetivos del golpe tenían que ver con abrir el camino para aumentar el poder del capital y sus ganancias, su capacidad de concentrar y centralizar el capital.

Podríamos generalizar eso sobre Argentina, Uruguay y otros países, porque muchos hablan de Estado terrorista, pero fue un Estado de terrorista con su contenido social, tuvo sus beneficiados y sus perdedores.Y es un análisis clasista que desenmascara el contenido social que determina quién gana y quién pierde a partir del terrorismo.

Este es un punto que quería enfatizar ya que debemos repensar nuestros conceptos cuando tratamos de entender nuestro pasado, porque los obstáculos para materializar cambios sociales cuando los militares dejan el poder son importantes. Porque en realidad simplemente castigando o cambiando la forma de gobierno de militares a civiles, de dictaduras a sistema electoral, no revela la importancia que tuvo el capitalismo ni permite cambiar el modelo. Por eso el capitalismo sigue reprimiendo y castigando a la clase obrera, porque nunca fue a juicio por su actuación y dirección del sector militar.

En el mejor de los casos, en Argentina llevaron a juicio a algunos militares, pero hasta ahora no han juzgado a los capitalistas de las grandes empresas que ganaron y dirigieron las prioridades de los militares.

Finalmente quiero comentar lo que está pasando en Venezuela. Creo que la clave es la inflación. No conozco ningún proceso electoral en que el candidato oficial, gubernamental, gane si hay una inflación arriba del 50%. Porque hay grandes sectores que no reciben reajustes con la inflación. El sector informal que no tiene salario fijo, no tiene ninguna forma de aprovechar los aumentos de salarios porque son auto-ocupados, y cuando los precios suben ellos tienen problemas para vender su mercancía.

Entonces creo que si en Venezuela el gobierno de Nicolás Maduro no controla la inflación, va a perder las elecciones de diciembre. Tenemos muchos ejemplos donde la elección frente a la inflación prolongada perjudica al gobierno de turno.

Extractado por La Haine

 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal