Zapatero dictamina lo necesario para salir de la crisis que no existe: trabajar y consumir. Igual hizo Juan Pablo II frente a la mortandad por hambruna en Etiopía: exhortarles a que comieran más

Que se lo metan en sus paupérrimas cabezas jibarizadas políticos españoles de todo pelo, sus jueces-vedettes y sus sirvientes mediáticos: donde hay poder siempre habrá resistencia.

El cocinero del rey convocó a las aves de corral a una reunión. Acudieron gallinas, pavos, faisanes, patos, codornices y perdices. Después de darles una calurosa bienvenida, tomó la palabra y les dijo: «Os he llamado para que me digáis con qué salsa queréis ser comidas».

¡Cualquiera diría que ser puta es la más indigna de las profesiones! ¿Acaso no está lleno el panorama político de hijos de banqueros, terratenientes, falangistas y hasta algún aristócrata?

¿Qué cosas tiene el lenguaje? Ahora resulta que violencia es darle fuego a una ETT y crearla, no. Violencia es ocupar una vivienda y obligarte a una hipoteca de por vida por sesenta metros cuadrados, no. Violencia es romper los escaparates de unos grandes almacenes y pagar a sus cajeras seiscientos euros al mes de salario, no