Seguramente nunca sabremos toda la realidad, ni todos los que estaban implicados en el supuesto golpe de estado lo cual nos da pie a poner nuestro grano de arena a la hora de interpretar los hechos.

ETA, Euskadi ta Askatasuna (Euskal Herria y la Libertad), declaró el 18 septiembre de 1998 una tregua unilateral y ETA la declaró rota el 3 de diciembre de 1999. Está más que claro que al ser esta una tregua unilateral, aquella que sólo atañe a una de las partes, el final de la misma no podría ser de otra manera.

Lo mas lógico sería el pensar que un juez, todo juez por lo cierto, tiene como prioridad la justicia.

Los jueces condenan a los jóvenes por ejercer la violencia y no condenan a la sociedad por doctorarles en ella.

Intereses de los gobiernos francés y español han retrasado la identificación del "presunto militante" de Euskadi ta Askatasuna (ETA) hasta el día de ayer.