Covid – 19 y salud mental: Impacto psicológico, problemática sistémica y mecanimos de control social

Si algo vamos a aprender estos días, es la influencia que tiene el contexto social para afectar psicológicamente en la mente humana, y la capacidad también de ésta para adaptarse a los cambios en el ambiente. ¿Alguien se había si quiera imaginado hace unos meses la situación en la que nos encontramos? El marco en el que desarrollamos actualmente nuestra vida ha cambiado completamente, la realidad sobrepasa nuestros esquemas mentales y nuestro cerebro ante esta situación de miedo tiende a responder de tres formas posibles.

Una es la respuesta de ataque o lucha, en estos momentos representada tanto por las personas que están trabajando para paliar esta situación y muestran solidaridad y entrega, como por otras que “necesitan” un culpable (tanto político como social) para desviar todo lo que el miedo les genera, lo que conlleva incluso el enfrentamiento entre vecinos/as. Otro tipo de respuesta es la evitación, la evasión tanto mental como física ante la respuesta emocional, que puede generar problemas futuros al no asumir la realidad en la que nos encontramos. Y la otra respuesta es la de indefensión ante el impacto de los acontecimientos; la vulnerabilidad ante el sufrimiento, la escasez de recursos por parte de la clase obrera, la incapacidad de movimiento, la inseguridad económica, la soledad y la falta de apoyo o la dependencia de algunos sectores de población, y como no el sufrimiento y el dolor por la pérdida de familiares y amigos/as. 

Ante este tipo de “alienación mental colectiva” generada por el mecanismo del miedo, nos queda una sociedad arrasada por el neoliberalismo que lleva muchos años introduciendo la individualidad en nuestras conciencias, el hedonismo personal y la mercantilización del humano… La sociedad deja de producir seres humanos para producir conciencias productoras y consumidoras alienadas. También, la ruptura de lazos sociales y la eliminación de estructuras colectivas y públicas, que nos hacen todavía más dependientes de las grandes élites capitalistas y las instituciones burguesas, dejando nuestra supervivencia en sus manos, sin entender que únicamente unas estructuras sociales unidas y creadas por la población trabajadora puede defender nuestros intereses de clase.

Además del miedo, hay un aparato de difusión muy potente que envía grandes cantidades de información a la población, algo que produce un efecto de sobrecarga mental, nos incapacita para filtrar contenidos y nos produce un bloqueo mental (desinformación), la posible pérdida de control de nuestras emociones y a la idea de inseguridad personal. Es muy importante no caer en esa excesiva exposición a la información actual de los medios capitalistas, manipulada en los laboratorios de control social del sistema.

En esta situación se produce un gran incremento de la ansiedad y el estrés a nivel social, que puede sacar a la luz trastornos mentales nuevos, trastornos obsesivo-compulsivos, hipocondriacos, pánico, depresión, etc.… Además, las condiciones hacen que aparezca la posibilidad de terapia online o a distancia, algo que influye en la calidad de los tratamientos y en la falta de atención a población de riesgo. Hay una falta de recursos psicológicos por parte de este sistema sanitario, que ahora los busca o necesita como donativo o voluntariado, mientras el sector de profesionales en psicología lleva años reivindicando esta falta de inversión pública y la psicología sigue sin considerarse como un servicio de primera necesidad.

Como organización comunista, nuestra posición ante los acontecimientos es la de ataque o lucha, contra un sistema económico que está claro que no se sostiene, y en este caso en el ámbito sanitario en particular. Llamamos a la reflexión sobre esta cuestión, a la necesidad de generar lazos y solidaridad colectiva de clase, como forma de entender que sólo el pueblo salva al pueblo y que es posible el cambio hacia una sociedad que defienda y proteja a todos/as por igual.

02/04/2020

COMUNISTAS DE CASTILLA.