Un joven palestino resultó asesinado por una bomba de gas que impactó directo en su cabeza, y decenas más fueron asfixiados por gas venenoso durante enfrentamientos con colonos y tropas de "Israel" en Nablus, en el norte de Cisjordania.
Grandes fuerzas del ejército de ocupación, acompañadas por una topadora militar, irrumpieron en la ciudad desde la calle Rujib y el puesto de control militar Beit Furik, para asegurar el asalto de los colonos a la Tumba de José.
El corresponsal de Al Mayadeen en la Palestina ocupada informó sobre docenas de vehículos llegados a la ciudad bajo asedio, pero los sionistas no pudieron alcanzar su objetivo, resaltó.
Este miércoles, "la situación es como una guerra en Nablus", reportó el corresponsal, y aseguró que los habitantes palestinos están a la expectativa de las próximas acciones de los israelíes.
Según destacó el reportero, la resistencia enfrentó con valentía la incursión. Las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa - Nablus presentaron violentos choques con las unidades de la entidad de ocupación.
Los medios israelíes esperaban para esta jornada unos dos mil colonos involucrados en el asalto a la zona, quienes se trasladarían en 40 autobuses.
El canal israelí Kan comentó: “Como siempre sucede, durante estas operaciones de entrada, vemos disparos contra las fuerzas del ejército”.
Recordó además que a finales de agosto la detonación de un artefacto explosivo hirió a un oficial y tres soldados en esa heroica zona. "Esperaremos a ver cómo va esta noche", dijo su comentarista.
Siete ciudadanos resultaron heridos y otros 130 sufrieron asfixia el 22 de septiembre pasado, durante el anterior ataque a Nablus por parte de las fuerzas de ocupación israelíes.