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México :: 24/10/2009

En México está abierta una perspectiva anticapitalista

Pável Blanco Cabrera
El movimiento obrero es uno de los centro de agresión de la política del Estado; el otro centro de la agresión son los pueblos indios

Ahora en Noviembre, se cumplen 90 años de que se fundara la Sección Mexicana de la Internacional Comunista, sin embargo esa gloriosa historia fue enterrada en 1981, cuando el PCM fue disuelto y transformado en un partido que ya no luchaba por el socialismo, sino por la democracia; que ya no luchaba por la dictadura del proletariado sino por la defensa de la democracia burguesa; que renunciaba a la revolución en aras de la vía parlamentaria; que ya no consideraba útil el centralismo democrático y en su lugar promovía la existencia de corrientes, algunas claramente antisoviéticas y también abiertamente anticomunistas. Años después, en una serie de entrevistas al Comité Central que encabezo la liquidación, Arnoldo Martinez Verdugo, último Secretario General, declaro ufano, que fue de gran visión anticiparse a la perestroika y deshacerse del lastre del “dogmatismo” marxista-leninista para integrarse a la corriente que lucha por cambios democráticos.

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