Un experimento de Mahzarin Banaji, profesora de Sociología de la Universidad de Harvard, muestra hasta que punto los sesgos de género condicionan nuestro pensamiento.
La profesora e investigadora pidió a sus alumnos que identificaran palabras sobre la carrera científica y sobre los cuidados. Así, Banaji plasma en una pantalla dos columnas. En la izquierda Masculino-Carrera, en la derecha Femenino-Hogar. Durante unos segundos, se proyectan palabras y los alumnos deben decidir a viva voz a que columna deben de ir vinculadas. En esta fase del experimento todos los alumnos realizan las asociaciones al unísono y con gran velocidad.
Después, la investigadora invierte las reglas y coloca en una columna el ítem Femenino-Carrera y en la otra Masculino-Hogar. El resultado es sorprendente y los alumnos tardan más del doble del tiempo en asociar palabras a cada una de las columnas, una muestra de hasta que punto pueden llegar los sesgos de género.
Ojo al experimento: profesora pide a su alumnado que pongan a la derecha e izquierda palabras sobre la carrera científica y sobre los cuidados.
Cuando el epígrafe es "Masculino – carrera" y "Femenino – hogar" van rápido. ¿Pero qué pasa cuando es al revés? [vídeo con subtítulos en inglés] https://t.co/VKByWAAAAM
— Lorena Fernández Álvarez (she/her) (@loretahur)
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