El internacionalismo entraña una larga tradición basada, primero, en la solidaridad para la búsqueda de la independencia y, después, en una identidad de clase. Para la década de 1960 estos proyectos estaban en debate y actualización con la experiencia de Ernesto Guevara, las organizaciones OLAS (Organización Latinoamericana de solidaridad) y la Tricontinental –a través de la OSPAAAL (Organización de Solidaridad con los Pueblos de Asia, África y América Latina)– que pretendían coordinar y articular las luchas descoloniales y de emancipación del Tercer Mundo, y la solidaridad europea con esas mismas luchas.
En este contexto emerge en Colombia la figura del sacerdote, sociólogo y político revolucionario Camilo Torres Restrepo (1929-1966).