'The Intercept': La CIA dirige escuadrones de la muerte en Afganistán

El portal estadounidense The Intercept, en un artículo publicado esta semana, ha revelado que entre un número significativo de civiles muertos en al menos 10 redadas nocturnas en la provincia oriental de Wardak, hay niños que fueron asesinados en una escuela local en una noche fría de invierno (boreal).

El documento, escrito por el reportero Andrew Quilty, indica que el asesinato de los civiles fue llevado a cabo por paramilitares afganos, entrenados por una unidad de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de EE.UU., conocida como 01, que actúan como “escuadrones de la muerte” en Afganistán con la participación de las Fuerzas de Operaciones Especiales y la Fuerza Aérea del país norteamericano.

Según el informe, basado en entrevistas realizadas a más de 50 residentes de Wardak, los mencionados 10 ataques nocturnos resultaron en la muerte de al menos 51 civiles, la mayoría de los cuales eran hombres jóvenes, menores de hasta 8 años e incluso mujeres, de los que solo un número reducido tenía vínculos oficiales con los talibanes.

Al respecto, Patricia Gossman, directora asociada para Asia de la organización pro derechos humanos Human Rights Watch (HRW), ha afirmado que la CIA ha considerado, durante mucho tiempo, la guerra en Afganistán como propia y que el asesinato de menores en Wardak pone de manifiesto que están tratando de eliminar no solo a los enemigos existentes, sino también a posibles enemigos futuros.

“Incluso si las tropas regulares estadounidenses abandonan el país, la CIA puede preservar la capacidad operativa de algunas de las unidades de reemplazo de Afganistán”, ha apostillado la directora, que describe como “vago” el futuro papel de la CIA en el país centroasiático.

En febrero, la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, y el grupo armado Talibán llegaron a un acuerdo, sin la participación del Gobierno afgano, que determinó, entre otros, el calendario de retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán, que en julio se redujeron a 8600 efectivos.

Transcurridos 19 años de la presencia de las tropas estadounidenses y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán para combatir a los talibanes, la inseguridad sigue campando a sus anchas en el territorio afgano y ha coadyuvado a la expansión de grupos extremistas como Daesh.

Un informe publicado en febrero por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) cifró en más de 100 000 el número de civiles muertos en la guerra en Afganistán durante los últimos 10 años.

El ente internacional reveló en abril de 2019 que los ataques de EE.UU. en Afganistán son más mortíferos para los civiles que los atentados que comenten los grupos insurgentes como el Talibán.