Durante 39 años las Madres caminan en la plaza de Mayo exigiendo justicia, memoria, dignidad para los pueblos, aparición con vida de sus hijas e hijos. Se hermanan con las causas en todos los territorios, denuncian los atropellos y las masacres, luchan por un mundo solidario, de iguales, y enseñan amor a manos llenas, con su dulzura en las miradas y en sus sonrisas.
Este año la consigna fue ¡Basta de neoliberalismo porque hambrea a nuestros pueblos!
Denunciaron el golpe de estado en Bolivia y la represión en Chile y en Colombia. Realizaron una radio abierta donde se recordó a las presas y presos políticos. Se analizó la situación en Haití, para pedir solidaridad con este pueblo que está en insurrección por varios meses.
Se recordaron los crímenes del estado y sus policías, los asesinatos de jóvenes, de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel.
Dijeron: ¡Basta de injerencia de EEUU en la política de Latinoamérica y el Caribe!.
Arremetieron contra la deuda ilegítima y las políticas neoliberales en Argentina, donde también se exigió la apertura de los archivos del terrorismo de Estado, y romper el pacto de silencio entre militares y la iglesia católica. «Que digan qué pasó con todos y cada uno de nuestros hijos e hijas desaparecidas».
También se exigió cárcel común y perpetua a los genocidas y sus cómplices.
Un año más se pudo escuchar: son 30.000.
Las y Los Detenidos desaparecidas presentes ¡ahora y siempre! ¡hasta la victoria siempre! ¡venceremos!
Resumen Latinoamericano