Los detenidos en la manifestación laica interponen una denuncia conjunta contra la policía nacional

Los detenidos en la manifestación laica del pasado 17 de agosto
el pasado martes 30 de agosto hemos
realizado una denuncia conjunta contra la policía por detenciones
ilegales, negación de asistencia médica, y agresiones realizadas de
forma premeditada.

El pasado miércoles 17, en torno a las 22:30 h, más o menos, la
policía nacional empezó a cargar de forma indiscriminada contra todas
las personas que nos encontrábamos en la puerta del sol y cercanías.

Arreaban golpes con sus porras a toda persona que estuviera cerca
de ellos sin que hubiera la más mínima provocación, golpeando con saña
y con un, más que evidente, deseo de hacer lo que estaban haciendo,
independientemente de que siguieran ordenes de un superior.

Podemos hablar de premeditación, ya que ninguno de ellos llevaba
placa identificatoria. Si ya de antemano salen sin identificación está
claro que sabían que no iban a actuar de una forma "adecuada" esa
noche.

Lxs detenidos fuimos rodeadxs y golpeadxs por policías numerosas
veces. A uno de los detenidos le destrozaron los dedos de la mano,
otro recibió un puñetazo en el estómago, a otro le golpearon en la
cara, brazo y espalda, rompiéndole una muela, provocándoles un
esguince y destrozándole las gafas. A otro le hicieron una herida
penetrante en la cabeza que no paraba de sangrar y le negaron
asistencia médica.

A parte de la colección de contusiones que recibimos lxs
detenidxs, los chicos volvieron a ser agredidos por la policía en
dependencias policiales, cuando ya no había cámaras delante.

Estuvimos detenidxs durante 40 horas. Mientras estábamos en los
calabozos apenas atendían nuestras necesidades a la hora de ir al
baño. Como anécdota "curiosa", en el lugar donde nos leyeron nuestros
derechos, había una bandera de ultrasur y símbolos nazis.

Los policías iban sin uniforme y con la cara tapada. Cuando nos
llevaron a declarar, delante de nuestros abogados, la persona que iba
a tomar nuestra declaración no llevaba identificación alguna y además
también llevaba la cara tapada; por este motivo nos negamos a
denunciar allí.

El viernes nos trasladaron a los juzgados de plaza de Castilla,
donde fuimos denunciadxs falsamente por atentado y lesiones.

Las denuncias particulares de los policías quedan desmentidas en
los vídeos existentes de la manifestación.

A pesar de ello hemos quedado en libertad provisional, debiendo
firmar cada quince días en los juzgados, hasta que se "celebre" el
juicio.

De las 8 personas detenidas ilegalmente sólo 3 nos hemos atrevido
a denunciar formulando una acusación por detenciones ilegales,
agresiones realizadas con premeditación, y negación de socorro en
algunos casos.