El 19 de octubre de 2.009 una vecina de la C/ Antonio Ayuso Casco, de Badajoz, encuentra en dentro de una caja de cartón, dos cachorros con claros signos de tortura. Presentaban mutilaciones en las orejas, el hocico, la lengua y el rabo. Como todavía estaban vivos, son trasladados a dependencias veterinarias, aunque debido a la gravedad en que se encontraban uno de ellos tuvo que ser sacrificado.
El 21 de Marzo de 2.011, los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado entran en la vivienda de la calle Cecilio Reino Vargas, 5 de Badajoz, propiedad de Nicolás Buiga Bueno. Durante el registro incautan diverso material informático, entre otras cosas, vídeos de tortura practicados a otros jóvenes cachorros, además de información personal de algunos miembros de distintas asociaciones protectoras de la región.
El 23 de Marzo de 2.011, el detenido pasa a disposición judicial y en declaración ante el magistrado del juzgado nº 3 de Badajoz, reconoce los hechos y asegura haber reincidido al menos con otros 20 cachorros.
El próximo 19 de abril a las 9:00 de la mañana tendrá lugar el juicio de este individuo, en el juzgado de instrucción número 2 de Badajoz