Al menos de manera pública, y según puede verificarse en el sitio digital del Instituto de Altos Estudios que lleva su nombre. La frase aparece referida un total de ochenta y ocho veces, en un arco temporal que inicia en 2001 y culmina en 2012. Notablemente, en veintitrés oportunidades no fue utilizada por Chávez, sino por alguno de sus interlocutores, casi siempre algún vocero o vocera popular, lo que habla a las claras de la manera como ella prendió en el seno de la base social de apoyo a la revolución bolivariana.
Chávez apeló a ella sesenta y cinco veces, más de la mitad de las cuales (treinta y cuatro) entre 2001 y 2003. Éste no es un detalle menor: la frase es mencionada por primera vez en un momento histórico en que el líder bolivariano da por sentadas las bases de la etapa correspondiente a la revolución política.