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Madrid :: 13/02/2014

Combatir al patriarcado: un deber.

UPK
UPK afirma que se debe combatir el Patriarcado desde posiciones radicales de clase, internacionalistas, anticlericales y en el marco de las luchas por la liberación sexual.

Unidad Popular de Clase afirma que se debe combatir el Patriarcado desde posiciones radicales de clase, internacionalistas, anticlericales y en el marco de las luchas por la liberación sexual. Estamos convencidas de que la exigencia incondicional del derecho al aborto reúne todos estos frentes, todas estas batallas enredadas:

· Nuestra batalla debe ser de clase: el número de abortos nunca disminuye como consecuencia de una legislación más restrictiva. Las mujeres trabajadoras mueren, las burguesas viajan.

Las restricciones que se han anunciado, que como hemos dicho afectarán sobre todo a las mujeres de la clase trabajadora, son especialmente intolerables cuando las políticas con las que los gobiernos de la burguesía dicen enfrentar la crisis, recaen de forma salvaje sobre las clases populares y muy especialmente sobre las mujeres. Obligar a quienes se queden embarazadas sin desearlo a ser madres, cuando los salarios, las prestaciones por desempleo, las ayudas a guarderías, comedores escolares, libros, etc, desaparecen, es además de un ataque brutal contra la dignidad y la libertad de las mujeres, un escarnio insoportable.

· La batalla también tiene que ser anticlerical: hay una relación directa entre el poder de las Iglesias, las restricciones del derecho al aborto y el aumento de los abortos clandestinos.

· La batalla, además, es internacionalista: las primeras en salir de cualquier sistema de cobertura social son las compañeras inmigrantes. Las más invisibilizadas, las primeras en morir.

· La batalla debe alinearse con las luchas por la diversidad afectivo-sexual: Si el enemigo une misoginia y homofobia, nosotras debemos plantear de forma amplia el derecho a decidir.

Queremos contribuir, con toda la humildad pero con toda la fuerza, al avance colectivo de la lucha por los derechos de las mujeres y por la construcción de un mundo en el que la libertad sexual, el derecho de todas y todos a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras identidades, sea la base de una sociedad de seres humanos nuevos, emancipados y libres.

 

Enlace al artículo: https://www.lahaine.org/eC3b