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Madrid :: 19/11/2014

[Móstoles] Las consecuencias de las privatizaciones

Voces de Pradillo
La empresa que sirvió gusanos en la comida de los escolares de Castilla y León es la que se encarga de la alimentación de los ancianos de Móstoles

Serunion S.A forma parte de un conglomerado de empresas de catering y restauración que desde 2001 son propiedad de la multinacional francesa Elior. Se trata de un grupo empresarial que ha experimentado un vertiginoso crecimiento en España gracias a las privatizaciones de comedores escolares, hospitalarios y de residencias de mayores, habiéndose hecho con las adjudicaciones de unos 2.800 comedores en centros públicos que atienden a más de 450.000 usuarios.

 

Serunion está presente en el Ayuntamiento de Móstoles desde el año 2010, habiendo facturado hasta la fecha 951.000 euros por atender la cafetería y comedor de la residencia de ancianos Juan XXIII así como el servicio municipal de comida a domicilio.

Esta empresa acumula numerosas denuncias desde hace varios años por la pésima calidad y estado de conservación de los alimentos que sirve, hasta el punto de haber causado graves intoxicaciones a escolares en dos ocasiones, con varias decenas de niños hospitalizados.

El 9 de octubre esta empresa servía gusanos en la sopa del cocido a escolares de cinco colegios segovianos y dos de León. La Junta de Castilla y León, tras la denuncia por atentado contra la salud pública presentada en comisaría por las familias, y a la vista del escándalo en los medios de comunicación, decidió abrir una investigación sobre el incidente que se cerraba el mismo 23 de octubre con una simple sanción de 24.020 €, descartándose la rescisión de contrato, ya que, en palabras de Juan Casado, consejero de Educación de la Junta de Castilla León, este incidente no ha causado ninguna alerta sanitaria. La responsabilidad política de la Junta se ha limitado a pedir disculpas a los afectados y a transmitirles un mensaje de tranquilidad garantizando la “calidad” de los menús servidos por esta empresa.

Veinte días después, el 11 de noviembre, la Junta de Castilla y León, gobernada por el Partido Popular, premiaba nuevamente a esta empresa, adjudicándole por tres años, hasta 2017, el catering de los colegios de la provincia de León por cinco millones de euros. Emilia Villanueva, antigua procuradora del PP en las Cortes de Castilla y León, y actualmente Directora Provincial de Educación, firmaba el contrato con perfecto conocimiento de que esta empresa, tan sólo un mes antes, había dado de comer larvas de gusano a escolares segovianos.

Gorgojos en la comida de los escolares de La Rioja

El 4 de noviembre se repetía el escándalo. Esta vez los afectados eran niños del colegio Nuestra Señora del Sagrario, de La Rioja, a los que se llegó a servir platos con gorgojos, un “incidente” que también ha sido calificado por el gobierno riojano como poco importante, ya que los gorgojos, en su opinión, no suponen ningún riesgo para la salud.

En La Rioja se adjudicó el servicio de comedor escolar a Serunion tras presentar esta una oferta económica que no era creíble, y que, según los pliegos de condiciones del concurso, constituía una baja temeraria, al situarse por debajo de los 4 euros, en concreto 3.71 euros. La oferta de Serunion debería de haber sido rechazada, algo que no ocurrió, siéndole adjudicado por un precio imposible de asumir.

Una larga lista de atentados contra la salud

Serunión acumula una larga lista de incidentes en numerosas provincias, resueltos en todas las ocasiones con un pequeño tirón de orejas por parte de la administración, sin que este historial haya supuesto jamás un impedimento para que, al mismo ritmo que se cerraban comedores e instalaciones públicas, fuesen creciendo los contratos con esta empresa.

En noviembre de 2006 eran hospitalizados 86 escolares de dos colegios sevillanos con gastroenteritis tras comer sopa y carne. 17 de esos escolares tuvieron que permanecer ingresados hospitalariamente varios días, pese a que la Junta calificó el “incidente” como poco grave y la empresa reconoció “errores”, limitándose a pedir disculpas a los afectados. Ese mismo mes dos colegios de Badajoz decidieron prescindir de los servicios de Serunion tras detectar una intoxicación alimentaria leve entre sus alumnos.

En enero de 2007, once centros escolares de Granada suspendieron las comidas servidas por Serunión al detectarse numerosas intoxicaciones e intolerancias alimentarias desarrolladas por la pésima calidad de los menús que esta empresa servía a los niños y niñas de los centros. No era algo nuevo, ya que se venían acumulando quejas desde el año 2005 por el mal estado y escasez de los alimentos, sin que la Junta de Andalucía se dignase a contestar a las AMPAs ni a los consejos escolares.

En esa fecha también se abre un expediente a esta empresa en los establecimientos residenciales de ancianos de Asturias, tras registrarse una intoxicación alimentaria en la residencia de mayores Jovellanos en Avilés. En Mallorca el Hospital Son Dureta detectó alimentos caducados de los que servía este catering y en el hospital de Alicante, catorce trabajadores de la cocina se intoxicaban también con comida de Serunion.

Ese mismo mes de enero, otros cinco centros educativos, en esta ocasión de Córdoba, denuncian el mal estado de las comidas que se sirven. En estos colegios las quejas de los padres y madres de alumnos se venían repitiendo desde el año 2001, fundamentalmente por lo escaso de las raciones servidas.

En 2012 aparecieron gusanos y larvas en la sopa servida en centros educativos de Elche y Alicante, localizados, según la empresa, en varias bolsas de cinco kg., de sopa de estrellas, el mismo producto que contenía gusanos en los casos de Segovia y León del año 2014. La inspección llevada a cabo por la Conselleria de Sanidad concluyó con que no había riesgo sanitario. Serunion decidió “tener un detalle” con los padres de los alumnos afectados no cobrándoles el menú en el que aparecieron los gusanos.

El caso más grave se produjo en mayo de 2012, cuando esta empresa fue sancionada por una “falta muy grave” con 908 euros al encontrarse una cuchilla en un segundo plato servido en un colegio de Mallorca. Precisamente en esta isla, la coalición Mes per Palma, denunciaba en agosto de este año que se estaban sirviendo menús basura por parte de Serunión, basándose en un informe elaborado por funcionarios de Cort, que en marzo de este año alertaban de las numerosas irregularidades detectadas en el servicio, como raciones insuficientes, ausencia de menús para celiacos o diabéticos, enfermos a los que se daba media ración por “política de empresa”. La coalición ecologista afirmaba que “si los regidores del PP comiesen en su casa ese menú basura, el problema se habría solucionado en cuestión de horas”.

Presentes en el negocio de los Bancos de Alimentos

Serunion está presente en la Fundación Privada Banco de Alimentos de Barcelona a través de Antoni Sansalvadó i Tribó, directivo de la empresa y presidente de la fundación. Estas fundaciones caritativas esconden en realidad un gran negocio para las empresas de distribución y producción alimentaria, ya que sirven para mantener el precio de los alimentos en el mercado, eliminando los excedentes, al tiempo que logran una bonificación fiscal en el Impuesto de Sociedades de hasta el 35%, reducción fiscal que no obtendrían si tuviesen que destruir los excedentes de mercado.

 

Enlace al artículo: https://www.lahaine.org/eM3E