Abdullah Öcalan, dirigente del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), ha sido objeto de una nueva prohibición de visitas de abogados y familiares, lo que ha agravado su aislamiento en la prisión de alta seguridad de tipo F de İmralı, en Bursa, Turquía. La última prohibición se suma a la prolongada privación de comunicación que sufre Öcalan desde hace 27 meses, lo que hace temer por su bienestar y la violación de sus derechos.
A los abogados del bufete Asrin que representan a Öcalan se les ha negado sistemáticamente el acceso a su cliente. A pesar de los esfuerzos por impugnar la prohibición por la vía legal, las solicitudes de visita quedan sin respuesta o son rechazadas por motivos disciplinarios.
Los abogados presentaron nuevas solicitudes de acceso después de que el terremoto del 6 de febrero afectara al centro penitenciario, pero descubrieron que Öcalan y sus compañeros de prisión ya habían recibido una prohibición de visitas de tres meses a partir de enero de 2023. A pesar de los persistentes intentos de conseguir visitas, los abogados se han enfrentado a nuevas denegaciones. Un tribunal de Bursa rechazó las solicitudes y objeciones, citando una nueva decisión de prohibición de visitas emitida por la administración penitenciaria de İmralı. El posterior recurso de los abogados ante el tribunal fue rechazado en abril, lo que consolidó la prohibición de las visitas familiares a Öcalan.
Las solicitudes de Öcalan para recibir visitas de abogados, prohibidas desde octubre de 2022, siguen sin respuesta. El aislamiento prolongado y la prohibición de las visitas suscitan preocupación por su bienestar y la violación de sus derechos. Los defensores de su caso siguen exigiendo acceso a su cliente y reclamando atención internacional.
CRONOLOGÍA
La Delegación İmralı, formada por representantes de varios países, ha instado al Consejo de Europa a intervenir y facilitar un nuevo proceso de paz. La diputada catalana Laura Castel, parte de la delegación, hizo hincapié en la necesidad urgente de liberación de Öcalan y su participación en futuras negociaciones para una resolución pacífica [de la cuestión kurda].
Durante su visita, la delegación observó el aislamiento de Öcalan y el creciente autoritarismo del gobierno turco. Fueron testigos de la escalada del régimen de aislamiento en İmralı y de la explotación de Öcalan con fines políticos. A pesar de las sentencias del Tribunal Europeo de DDHH contra la cadena perpetua de Öcalan y de la responsabilidad del Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) del Consejo de Europa en la lucha contra la tortura, aún no se han tomado medidas concretas para hacer frente a las violaciones de DDHH en Turquía.
En la presentación de su informe durante la reciente reunión del Consejo de Europa en Reikiavik, la delegación pidió medidas decisivas, como negociaciones de paz, la liberación de Öcalan y la aplicación de las decisiones del Tribunal Europeo de DDHH.
Fazela Mohammed, compañero de lucha de Nelson Mandela, también ha criticado el trato que Turquía dispensa a Öcalan, instando a que se tomen medidas inmediatas contra su aislamiento absoluto, calificado de tortura según el derecho internacional.