Lucha de clases aunque a veces no lo parezca (1)

“Detrás de los fríos números en Euskal Herria un tercio de la población (¡1 de cada 3!) sobrevive por debajo del Umbral de Pobreza, en silencio e invisibles a nuestro deambular frenético. Es hora de despertar de concienciarse y de plantarle cara al sistema”.

Lo dice ELKARTZEN. Movimiento a favor de los derechos sociales en EH. Son cifras de hace unos meses.
Y entonces ¿cómo nos cuentan los medios de comunicación del sistema, y algunos que se postulan como alternativos, que en las pasadas navidades hemos gastado un tanto por ciento X en…? ¿Cómo nos dicen que eso es la media de gasto de todas/os? El sistema se reproduce así, asimismo, claro.

Unos más ricos y otros más pobres. De eso parece que más o menos nos vamos dando cuenta. La cuestión es que quizá esa realidad todavía muchos/as no la hemos procesado. No la hemos contrastado y vuelto a repensar hasta darnos cuenta que los de arriba nos tienen asfixiados a los de abajo. Y que efectivamente hay arriba y abajo. El siguiente paso ha de ser decidirnos a hacer algo nosotras mismas.

Y continuamos hablando de pobres.

Cifras oficiales, harto de ser sospechosamente favorables a la clase y fracciones de clase que nos domina: 300.000 vascos/as de las provincias del sur sufren la pobreza energética. Estamos hablando de la imposibilidad de disfrutar satisfactoriamente de artefactos eléctricos que nos dan luz, nos posibilitan la manutención, nos dan calor… Hay quien no dispone de calefacción. Hay quien tiene y la pone un par de horas al día. Hay quien de vez en cuando pone algo al horno porque gasta demasiado. Y hablamos de los que tienen problemas para costearse lentes, cuidarse la boca, pagar el alquiler de la vivienda… Al final serán necesidades a las que, por debajo de la aristocracia trabajadora, cada vez será más difícil acceder.

Hablemos de América.

“El planteamiento de Camilo de que es la oligarquía quien define si la lucha popular por el poder, es por la vía legal o ilegal, está hoy sobre el tapete cuando nos empeñamos como insurgentes en un proceso de paz.

La paz como lo hemos reiterado, es el logro de una Colombia con democracia, justicia, equidad social y soberanía, estos propósitos no han cambiado desde que Camilo fue guerrillero del ELN, por ellos él decidió empuñar las armas, así que la oligarquía colombiana sigue teniendo la palabra a más de medio siglo cuando Camilo se agigantara como dirigente popular y guerrillero”.

Son parte de unas declaraciones públicas efectuadas por un comandante de la dirección de la guerrilla colombiana del ELN. La cuestión es que después de analizar éstas, tenemos cierta inquietud. Quizá porque no conocemos procesos revolucionarios que hayan llegado a buen puerto en una mesa de negociación. Y nos viene a la mente el proceso entre las FARC y el títere de la oligarquía colombiana y del imperialismo yanqui que es el gobierno colombiano, con Santos el Nobel a la cabeza.

Volviendo a las declaraciones se habla de la "toma del poder", que no del simple acceso al gobierno. Eso nos tranquiliza. Y dice que lo tienen bien presente cuando se empeñan en un "proceso de paz". Ahí ya nos revolvemos un poco. Esto es, proceso de paz es la denominación que el sistema utiliza cara a ir a una mesa de negociación donde el objetivo es integrar a la Resistencia y mantener a toda costa el monopolio de la violencia.

A partir de una mesa de negociación y dejando muchísimas cosas en la mochila, se puede llegar a gobernar. Es decir se puede llegar a gestionar el poder de la clase burguesa y el imperialismo. Pero de ninguna manera supone tener el poder. Tenerlo significa cambiar radicalmente el modelo socioeconómico, las relaciones sociales de producción, organizar el Estado en base a las necesidades de la clase trabajadora, controlar los poderes reales, el coercitivo, asegurar la total independencia, nacionalizar… "Y la paz es una Colombia con democracia, justicia, equidad social y soberanía. El enemigo no va a negociar ni su democracia ni su justicia ni…" Y cuando le interesa incumple todo lo negociado. Normalmente desde el principio y más aceleradamente cuando la Resistencia se prepara para la vida civil, social y política en la legalidad del enemigo. La experiencia en la misma Colombia, años 80 y 90, con los asesinatos de los guerrilleros que bajaron y se integraron en la Unión Patriótica es un claro ejemplo (entre otras se baraja la cifra de 5000 asesinados) Y más cuando hoy en día los paramilitares están ya ocupando territorios que han abandonado los frentes guerrilleros de las FARC para concentrarse, entregar las armas y participar en la vida política y social de manera civil. Y todo esto sin que hayan cesado los asesinatos de líderes comunales, campesinos, abogados, militantes de derechos humanos… Resumiendo que nos da miedo la utilización de la terminología del enemigo a pesar de que se mantenga la consigna de revolución o muerte y el carácter exploratorio del momento actual para testar la voluntad del gobierno colombiano. Así que confiemos en que el ELN no dé pasos que puedan ser irreversibles para su derrota.

Y decimos todo esto en parte porque el mensaje solidario del FMLN del Salvador es inquietante, tanto como la situación del país después de los acuerdos de paz de 1992. El mensaje en clave de consignas dice: "viva la paz, proceso de paz, viva la unidad entre los pueblos del mundo…" Y bien reciente tenemos una experiencia coherente hasta el momento. Y no nos erigimos en tribunal alguno salvo en de la libre opinión desde el punto de vista de los de abajo. Y esta experiencia se sitúa en Filipinas. Nos referimos al conflicto que se dirime entre la guerrilla del NEP, partido comunista y frente democrático por una parte y el gobierno actual por otra. Los primeros acuerdos negociados han sido incumplidos por el gobierno filipino al no aplicar la amnistía y atacar a la guerrilla. Ante esa tesitura, el NEP ha suspendido el alto el fuego y el enfrentamiento continúa. Es evidente que hasta ahora el NEP no tiene voluntad de rendición ni el gobierno de negociación.

Gara: Dos menores de Altsasu sin medidas cautelares.

Una frase que más que explicar esconde. Es un titular diría alguien, no se puede explicar todo. Es posible. Pero según la posición y voluntad de la línea editorial de un medio de comunicación hará una u otra lectura. Y la influencia en sus lectores será una u otra. Las medias tintas son casi imposibles pues tienden siempre hacia un lado. Y los medios de comunicación no son de la clase trabajadora precisamente, aunque alguno naciera bajo sostén económico popular. ¿Por qué esconde Gara? Se informa según qué intereses o no se informa, depende.

La cosa es que los dos menores no están exentos de juicio. Ese es el meollo de la cuestión. Ese es el problema. Eso es lo que había que resaltar. Es decir, que no están exentos de prisión. Y no que no tienen medidas cautelares. Es decir, una sería: tranquilidad señores y señoras. La otra, los menores siguen con riesgo de prisión, o similar.

Subrayamos que para este caso, como en los pasados y de aquí en adelante, ejerceremos el derecho de opinión con la intención de aportar algo a los imprescindibles debates abiertos aquí y allí. Desde el respeto a todos y dispuestos a corregir lo que fuera si ello fuese pertinente.