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Nacionales E.Herria :: 04/09/2017

La sombra de 'Falange y tradición' vuelve a Euskal Herria

La Haine - Euskal Herria
Desde hace aproximadamente un mes, han sido varias las acciones y atentados fascistas llevados a cabo en distintos puntos de Euskal Herria

Desde hace aproximadamente un mes, han sido varias las acciones y atentados fascistas llevados a cabo en distintos puntos de Euskal Herria, con un ‘modus operandi’ que recuerda al del grupo ‘Falange y tradición’, que fue desarticulado en octubre de 2009 tras una cadena de ataques y amenazas a personas, locales y monumentos durante los años 2008 y 2009.

Uno de los detenidos en aquella ‘Operación Quimera’, que desarticuló aquel grupúsculo fascista fue Jose Ignacio Irusta Sánchez, alias “El barbas” o “el carlista”, el cuál figura como jefe territorial de Falange en el País Vasco desde finales del año pasado.

Este verano, Jose Ignacio Irusta ha vuelto a dejarse ver públicamente, a la vez que ha comenzado la actividad de su cuenta de twitter ‘Falange vasconavarra’, https://twitter.com/Tussuria, desde la cuál se han jaleado los distintos actos fascistas cometidos, se ha amenazado a personas y locales de los movimientos sociales así como de la Izquierda Abertzale.

A principios de agosto, en fiestas de Leitza, Jose Ignacio participó junto al concejal por UPN en Leitza, Silvestre Zubitur, en la misa en honor a San Tiburcio, patrón de la localidad, en Leitza. Después de esto, Irusta aseguró a través de twitter que “gracias a la presencia de la Benemérita en Leiza nuestro acto no quedó deslucido”.

Tras Leitza, llegó la semana grande de Bilbao, ya desde antes de comenzar, a través de su cuenta de twitter anunció que “El sábado 19 de agosto –día del chupinazo- los falangistas vasconavarros nos reuniremos en nuestra sede de Bilbao, después habrá cena y poteo por el casco viejo”. Ese mismo día durante el chupinazo falangistas colocaron una bandera española de 20 metros desde el ascensor de Begoña, que un rato después fue retirada por activistas antifascistas.

Curiosamente esa misma noche fue atacado en Artxanda el monumento "La huella", que recuerda en Artxanda (Bilbao) a los gudaris y milicianos que lucharon contra las tropas franquistas en la Guerra Civil. El monumento fue pintado con el anagrama del yugo y las flechas y la palabra “Falange”, en una acción que recuerda a las del desarticulado grupo “Falange y tradición”.

Las cosas no acabaron ahí, y Irusta anunció por twitter que “nuestros abogados han planteado hoy denuncia en el juzgado de guardia de Bilbao contra una chozna o chiringuito blasfemo contra jesucristo”, en referencia a la konpartsa Hontzak, que a modo de parodia había decorado su txozna con la imagen de un Cristo troceado bajo el título de 'Carnicería vaticana'. El mismo lunes de semana grande, la ertzantza accedía al recinto festivo del Arenal para retirar dicha imagen por “una denuncia del obispado” por un delito contra los sentimientos religiosos, según apuntaron varios medios.

En respuesta, la imagen se multiplicó por todo el recinto festivos cuando otras 20 txoznas decidieron ponerla en solidaridad con Hontzak. Desde su cuenta de twitter, Falange continuó con sus amenazas: “si las blasfemias se multiplican en Bilbao, también lo harán las denuncias, y si no prosperan, prosperarán las hostias benditas, amén”. Poco después trascendió la noticia de que la denuncia había sido ampliada al resto de las konpartsas solidarias con Hontzak.

En un comunicado (http://www.lafalange.org/2017/08/20/acciones-en-vascongadas-de-la-falange-vasconavarra/), Falange asumía la colocación de la bandera “gracias a uno de nuestros militantes que trabaja en el Ayuntamiento de Bilbao, quien nos proporcionó la llave del candado para acceder al lugar” así como la denuncia contra Hontzak. Sobre el resto de los hechos, Falange decía que había habido una cena, y que “a partir de la madrugada, nuestros militantes se dispersaron con gran algarabía que se tradujo en inflamaciones de ánimo que la Falange Vasconavarra desde aquí condena con toda severidad.”

El último sábado de fiestas, el sábado 26, se registró además un ataque contra la Taberna Lekerika de la calle Somera de Bilbao, que fue denunciado como un ataque fascista por activistas de la ciudad. El ataque consistió en romper los cristales y arrojar pintura sobre la fachada del local.

Tras Bilbao, la cuenta de twitter de Falange Vasconavarra, amenazó al pueblo de Altsasu, con el siguiente mensaje: “próxima reunión de falange en sept. en Alsasua. enseñaremos a la Benemérita cómo hay que gobernar las piaras de cerdos sin tener lesiones”.

Las fiestas de la localidad navarra todavía no han empezado, pero el cercano monumento a las víctimas de la represión franquista en el valle de Sakana, en Otsoportillo, fue atacado la noche del pasado viernes, en un intento de sabotear el acto de homenaje que anualmente se hace a los asesinados por el franquismo. El ataque consistió en pintadas con el logo de Falange y la frase “aún hay sitio para más”, pero fueron borradas por los guardas nada más encontrarlas, frustrando así el intento de empañar el acto.

Sobre este ataque, la citada cuenta de twitter publicó esto:

Ante estos ataques, el movimiento memorialista vasco, ha pedido tanto a los alcaldes de Bilbao como de Sakana que denuncien estos actos por delito de odio y amenazas.

Cabe recordar que Irusta fue condenado en 2015 a dos años de cárcel, la sentencia consideró probada la peligrosidad de estas personas, ya que se llega a afirmar que Irusta entro en contacto con Jose Luis Roberto, el líder de España 2000, con el fin de obtener armas de fuego para emplearlas en acciones violentas contra integrantes de la izquierda abertzale en nombre de Falange y Tradición. Sin embargo, los integrantes de Falange y Tradición esquivaron la cárcel al ser sólo condenados por los ataques a monumentos, pero ser absueltos de los delitos de daños con finalidad terrorista, asociación ilícita y revelación de secretos.De hecho, en un primer momento el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno rehusó juzgarlos en la Audiencia Nacional, hasta que el Supremo declaró competente a ese Tribunal.

En definitiva: Falange ha comenzado nuevamente su actividad en Euskal Herria, y esto ha venido acompañado de varios ataques fascistas, los cuáles han sido todos reflejados a través de dicha cuenta en Twitter. La mencionada cuenta de Twitter es una amalgama de amenazas contra activistas de izquierda- de los cuáles algunos hasta aparecen con foto y dirección, en una clara amenaza-, locales, personas migrantes, etcetéra…Además su responsable es el mismo que el del desarticulado grupo Falange y tradición, y su ‘modus operandi’ es bastante similar.

Cada cuál que saque sus propias conclusiones.

 

Enlace al artículo: https://www.lahaine.org/fI5a