Una vez más la atención del mundo se vuelca hacia Venezuela, no solo en el intento de algunos países en vulnerar su soberanía, sino en la solidaridad que organizaciones sociales y políticas expresan hacia el pueblo venezolano.
Esta manifestación se materializará el próximo 23 de febrero, con la realización en Caracas de la Asamblea Internacional de los Pueblos en solidaridad con la revolución bolivariana y contra el imperialismo, encuentro impulsado por organizaciones sociales de todos los continentes, que tiene entre sus objetivos dar una muestra de respaldo al país y a la Revolución Bolivariana.
Así lo informó Joao Pedro Stédile, dirigente del Movimiento Sin Tierra (MST) de Brasil y principal promotor de la AIP. Para el dirigente brasileño, se debe respaldar a Venezuela ya que es la primera barrera de la crisis mundial del capitalismo, “si el imperio rompe la barrera y se apodera del petróleo venezolano, lo hará con muchas más facilidades en otros países y otros continentes”, indicó.
Según Joao Pedro, el mundo vive esta crisis provocada por el capitalismo desde el 2008; es por esto que sus actores tratan de recomponerse haciendo una ofensiva hacia los bienes comunes de la naturaleza (petróleo, minería, agua y semillas), hacia los derechos de los trabajadores y con agresiones a través de invasiones militares como Libia, Siria y ahora Venezuela.
En ese sentido, Carlos Barrientos, del Comité de Unidad Campesina (CUC) de Guatemala y delegado de la AIP, dijo que el espíritu venezolano está presente en la mística de lucha de las organizaciones populares de todo el continente, “porque la lucha no es solo de los venezolanos y venezolanas, es de todos los latinoamericanos… porque Venezuela es una trinchera de resistencia y esperanza”, agregó.
Por su lado, la delegada de los Estados Unidos y parte del Colectivo Artístico Rebel Díaz, Claudia De La Cruz, expresó un agradecimiento a la Revolución Bolivariana ya que el Comandante Chávez apoyó activamente al pueblo estadounidense, especialmente a los más pobres durante momentos en que el gobierno de los EE.UU. los marginó más.
“Entonces el pueblo de los Estados Unidos entiende que tenemos una deuda histórica con Latinoamérica, que desafortunadamente ha sido tratada como el patio… y esperamos en crear vínculos de solidaridad, en crear puentes y proyectos en común” indicó la activista de los EE.UU.