Nación Andaluza ante el 83º aniversario del asesinato de Blas Infante

¡CONSTRUYENDO ANDALUCISMO REVOLUCIONARIO PARA UNA ANDALUCÍA INDEPENDIENTE!

España fue y es una hacienda unificada por el derecho divino de los reyes.

Infante, B. Fundamentos de Andalucía. 1931, pág. 167

Ante una nueva conmemoración del asesinato de Blas Infante a manos del fascismo español, el españolismo vuelve a intentar apropiarse de su figura, presentándonos una caricatura grotesca, a imagen y semejanza de los herederos políticos de los asesinos franquistas; nos presentan un Blas Infante insípido, pusilánime; un Infante que ya no da miedo a aquellos que lo asesinaron por revolucionario y separatista. Su ideología ha sido durante 40 años desprendida de toda carga revolucionaria y liberadora, convirtiéndolo en un símbolo del sistema al servicio de las políticas de alienación y sometimiento de la Junta de Andalucía.

Este año la instituciones se debaten entre seguir realizando el ejercicio de “celebración” de su asesinato en el que se incluyen desde el PP hasta Podemos -todos juntos al amparo de la Fundación Blas Infante, esa institución que se creó con fondos públicos para taponar al andalucismo revolucionario- o ignorar definitivamente la fecha presionados por el peso institucional que la ultra-derecha posee en la actualidad. El ascenso institucional de Vox ha producido que estos manifiesten abiertamente sus intenciones (que comparte con el resto de partidos al servicio de la oligarquía pero que no se atrevían a expresar públicamente): que prefieren la Andalucía conquistada (la de los Reyes Católicos) a una Andalucía soberana (la de Blas Infante). Lo cierto es que unos y otros llevan trabajando décadas para hacer desaparecer -tergiversando, mutilando o directamente ocultando su pensamiento político y social abiertamente soberanista y revolucionario- a Blas Infante tal cual era. Vox tan sólo expresa el último paso de este proceso que se inició con el asesinato de Blas Infante una noche del 10 al 11 de agosto de 1936 a las afueras de Sevilla.

En contraposición a la hipocresía de los actos “oficiales”, NACIÓN ANDALUZA, junto a otras organizaciones, seguimos promoviendo un homenaje soberanista -autogestionado y popular- a Blas Infante el dia 10 de Agosto en la Plaza Jauregui (actualmente plaza Padre Jerónimo de Córdoba) de Sevilla, lugar donde estuvo detenido previamente a su asesinato. En este acto rendiremos homenaje al Blas Infante que fue asesinado y condenado cuatro años más tarde a pena de muerte por un tribunal franquista:

“…DON BLAS INFANTE formó parte de una candidatura de tendencia revolucionaria en las elecciones de 1931 y en los años sucesivos hasta el 1936 se significó como propagandista para la constitución de un partido andalucista o regionalista andaluz, y según la certificación del folio 46 falleció el 10 de agosto de 1936 a consecuencia de la aplicación del Bando de Guerra”

El asesinato de Blas Infante se produjo en el contexto de los planes elaborados por la burguesía española, con el ejército golpista como ejecutor, para eliminar físicamente toda la disidencia política, especialmente a los integrantes de organizaciones revolucionarias y antiimperialistas. Unos días antes habían asesinado a otro andalucista revolucionario, Antonio Ariza Camacho, y decenas de sus correligionarios serían perseguidos.

Pero esa eliminación no se limitó al periodo de guerra; fue más allá. Durante todo el franquismo fueron miles las asesinadas, cuyos restos a día de hoy continúan en las fosas comunes existentes en las cunetas de muchas carreteras andaluzas, como los restos de Blas Infante. Durante la Transición (pacto entre el franquismo y la socialdemocracia) continuó la represión para asegurar una “democracia” que no alteraran el status-quo surgido de los pactos de la oligarquía con González y Carrillo. Por ello, hoy también recordamos a García Caparrós, Javier Verdejo, los jóvenes del Caso Almería, los asesinados en la huelga de la construcción en Granada, etc. Y también recordamos al andaluz Fran Molero que continúa en prisión tras un montaje policial y un juicio farsa, como escarmiento a todas aquellas andaluzas que se atreven a desafiar al Régimen en la calle, cara a cara con las fuerzas de represión. Tampoco nos olvidamos de todas aquellas que continúan sufriendo la represión del sistema capitalista que nos explota cada día más para mantener su tasa de ganancia: paradas, trabajadoras en precario, emigrados, trabajadoras temporales, jornaleras, etc., un ejército de mano de obra barata para beneficio del capital. Y todo ello bajo la fórmula “legal” de la leyes laborales y la ley mordaza, en un intento por impedir la protesta social y la disidencia política. Presos políticos catalanes, vascos y gallegos continúan en las cárceles españolas; los juicios contra raperos, titiriteros, artistas y manifestantes continúan intentando amordazar a la disidencia antisistema, mientras los representantes de la burguesía española y sus bufones en Andalucía se apropian de los símbolos de liberación social y nacional de la clase trabajadora andaluza, entre los que Blas Infante es uno de los principales.

La emancipación del Pueblo Trabajador Andaluz ha de ser obra del propio Pueblo Trabajador Andaluz. Nadie habrá salvarnos sino nosotras mismas con la organización y el combate diario en los tajos, en las calles, en las aulas… El 10 de agosto ha de ser un día de homenaje pero también de reafirmar nuestro compromiso por la consecución de una Andalucía independiente, socialista y feminista. Por todo ello, desde NACIÓN ANDALUZA hacemos un llamamiento a todas las andaluzas soberanistas, independentistas y revolucionarias para que el próximo sábado asistan al acto reivindicativo que la izquierda soberanista andaluza llevará a cabo en Sevilla en la plaza del antiguo cine Jauregui a las 19 h.

¡Viva Andalucía libre!

Permanente de la C.N. de Nación Andaluza.

Andalucía, 8 de agosto de 2019.