Breve aproximación a la Historia oculta del “terrorismo”

x Jesús García Blanca - www.cadizrebelde.com

“Hoy es un día trágico para la Comunidad Internacional y lo primero que quiere hacer el Gobierno es tener un recuerdo y reconocimiento a las víctimas del atentado terrorista de ayer en Bagdad, muy especialmente a la familia del Capitán de navío Martín-Oar”
Declaración institucional de Aznar. Comunicado de la Secretaría de Estado de Comunicación. El País, 21 de agosto.

“Los socialistas condenan los atentados terroristas en Iraq”. Luis R. Aizpeolea. El País, 21 de agosto.

Mis relecturas históricas del verano me han deparado la sorpresa inaudita de encontrar una proliferación de grupos y actividades “terroristas” acosando a las diferentes sociedades humanas desde el albor de los tiempos y que hasta ahora habían pasado totalmente inadvertidas para mí.
He achacado esa descomunal distracción al hecho de haber tenido que estudiar la historia universal angustiado por la exigencia de memorizar fechas, nombres de reyes y batallas, dinastías y demás vicisitudes entonces exigidas en los exámenes, trabajos y rendimientos de cuenta diarios a los que me vi sometido junto a toda mi generación.
Para ellos y para el resto de ciberlectores que pudieran haberse despistado tanto como yo, he recogido aquí una muestra que no pretende ser ni mucho menos exhaustiva ni sistemática, sino apenas un vistazo fugaz a la historia oculta del “terrorismo” internacional.

Próximo Oriente

  • Quizá las más antiguas acciones “terroristas” que registra la historia sean las perpetradas por grupos violentos de Elam, Mesopotamia y Siria contra el Imperio de Akkad allá por el 2350 antes de Cristo.
  • Entre los siglos VIII y VII AC les tocó a los Asirios sufrir la plaga del “terrorismo”: pueblos hurritas y de las montañas de Irán, de Capadocia, de Siria y de Babilonia atentaron contra soberanos de nombres inolvidables: Tiglatpileser o Tukultininurta, “el que colmaba los valles de cadáveres”.

Grecia y Roma

  • El levantamiento de los griegos de Jonia contra Darío hacia el 499 AC fue el desencadenante de una de las más famosas –y desapercibidas- cadenas de acciones “terroristas” de la antigüedad: las erróneamente conocidas como “Guerras Médicas” en las que grupos armados de toda la Hélade enfrentaron al imperio persa en su intento de exportar el orden a occidente.
  • Pero posiblemente corresponda a Roma –República e Imperio- el trágico honor de haber soportado la mayor cantidad de atentados, acosos, revueltas y acciones “terroristas” por todo lo largo y ancho de su infinito territorio.
  • Ya en el 298 AC, una coalición de violentos formada por samnitas, etruscos, celtas, sabinos, lucanos y umbros tuvo que ser ejemplarmente aplastada por las legiones imperiales con objeto de ir ensanchando las fronteras de la ley y de la paz –la pax romana.
  • Posteriormente, en el 136 AC, fueron los esclavos de Sicilia los que abandonaron el arado que tan generosamente les habían proporcionado sus dueños legítimos para sembrar el “terror”.
  • Algo después, Espartaco hizo lo propio convirtiéndose en el primer “terrorista” cuyo nombre propio ha sido recogido por la historia. Los detalles de sus fechorías ya los conocemos por la película cuyo guión hubo de firmar Dalton Trumbo con seudónimo consciente como era de estar haciendo “apología del terrorismo”.
  • Después vendrían otros nombres propios: Vercingetorix en la Galia (habrá que investigar las posibles implicaciones delictivas de Gosciny y Uderzo) o Viriato en Hispania que asediaron con saña a las tropas civilizadoras romanas mientras transformaban dos paraísos naturales en útiles graneros y almacenes, acabando con las prácticas salvajes y domesticando territorios y personas. La resistencia irracional y fanática demostrada por los violentos en Numancia, Astapa o Calagurris retrata perfectamente el carácter cerril y montaraz de estos grupos armados que no dudaron en utilizar a la población civil como escudos humanos provocando así su aniquilación.
  • Ya después de Cristo –que fue igualmente ejecutado como sospechoso de incitación a desórdenes públicos y posible pertenencia a banda armada- el Imperio hubo de enfrentarse a “terroristas” númidas y bereberes donatistas, y a violentos separatistas cántabros y vascones, especialmente a los temibles grupos armados conocidos como Bagaudas, durante los siglos III y IV.

Reinos bárbaros

  • Metidos ya en las postrimerías de la llamada Antigüedad y al filo del Medievo, nuevos grupos armados de cántabros, vascones y astures aterrorizaron a los nuevos representantes del Poder civilizador, los Visigodos.
  • Rondando los siglos IX y X, allende los Pirineos, “insumisos” y desertores acosaban a Carlomagno y a Luís el Piadoso, cuyos apodos hablan por sí mismos de la indudable calidad humana de estos ilustres personajes que hubieron de combatir a asociaciones juramentadas con todo el peso de la nueva versión de la justicia imperial.
  • Un siglo más tarde, se registran nuevas acciones “terroristas” que incluyen motines, pillajes e incendios, en Bretaña, Flades, Inglaterra y Francia.
  • Y entre los siglos XIII y XIV, junto a los motines en ciudades de nuestra aún no terminada de reconquistar España (Irmandiños en Galicia, y otros grupos similares en Barcelona, Lugo y Oñate) aparecen en los Montes de Toledo y La Jara, los Golfines, todos ellos auténticas cánceres de una sociedad que luchaba por la pureza de sangre, la ortodoxia religiosa frente a la chusma musulmana y los merecidos privilegios de las casas reales que habían luchado valerosamente contra el moro invasor.

América

  • Los siglos posteriores se verían empañados por la violenta oposición de los salvajes del Nuevo Mundo y sus acciones “terroristas” contra los reinos y señoríos de Indias, los repartimientos y las encomiendas españolas y portuguesas, y especialmente contra la sagrada labor evangelizadora que habría de llevarles la luz y la verdad y liberarlos de sus idolatrías selváticas y primitivas en un nuevo “combate entre la Civilización y el Caos” que elementos sediciosos –rozando peligrosamente el enaltecimiento del terrorismo como Bartolomé de las Casas- no llegaban a comprender.
  • Desgraciadamente, las tierras americanas habrían de dar a la historia una interminable galería de “terroristas”: desde las tribus salvajes del norte que aterrorizaban a los colonos anglosajones en las tierras que ellos mantenían en un lamentable estado de improductividad y en las que tan trabajosamente el impulso civilizador fue extendiendo ferrocarriles y ciudades, hasta los famosos caudillos terroristas del centro y del sur del continente: Emiliano Zapata, Manuel Palacio Fajardo, Simón Bolivar, Francisco Miranda, Miguel Hidalgo, José Gervasio Artigas, y un inquietante etcétera.

Gran Bretaña

  • En 1812 los honrados empresarios británicos han de enfrentarse con los atentados “terroristas” de los Luddistas, que en un desesperado intento de frenar el progreso que procura el bienestar de los pueblos forzaron a las autoridades a castigar sus destrucciones de maquinaria con penas capitales.
  • El siglo XIX sería especialmente sangriento para el Imperio británico que, a pesar de sus esfuerzos por extender las fronteras de la civilización hasta zonas casi inaccesibles del planeta, encontró la incomprensión de numerosos fanáticos nacionalistas y extremistas religiosos que atentaron en numerosas ocasiones contra los valerosos soldados de su majestad: en Egipto, Sudan, Rhodesia, Australia, Nueva guinea, Nueva Zelanda o la India, donde algunos oficiales del imperio no tuvieron más remedio que recurrir al asesinato a sangre fría de millones de mujeres y niños indígenas para hacer entrar en razón a los violentos agazapados en montes y selvas.

Rusia

  • En la misma época y en la lejana Rusia, a Alejandro II le tocó enfrentarse con otros “terroristas”: los mujiks (campesinos) y grupos de estudiantes y jóvenes violentos incapaces de comprender las bienaventuranzas de servir al Zar. Y en 1863 ocurrió lo propio con los polacos. El gran hombre de estado que fue el Barón Bismark lo asesoró en su lucha contra el “terrorismo” con sabios consejos que se vienen repitiendo en las situaciones rigurosas de amenaza para la civilización: “despedazad a los polacos hasta que no quede ni uno; me dan mucha lástima, pero si queremos sobrevivir no podemos hacer otra cosa que extirparlos”.

Francia

  • A finales de siglo, en Francia, se produjo uno de los mayores golpes contra el “terrorismo” organizado: ante la amenaza constituida por la llamada “Comuna de París”, nido de violentos opositores del orden constituido, se reaccionó con firmeza y valor: 45.000 juicios, 7.500 deportados y exiliados, además del exterminio de innumerables insurrectos en el cementerio del Pére Lachaise.

Italia y Alemania

  • Y como ejemplo final –por mantener una distancia de cincuenta años que permita una mejor y más afinada perspectiva histórica- los diferentes y numerosos grupos “terroristas” que asediaron al resurgido imperio romano en Italia (entre 1926 y 1940) y Alemania (a partir de 1940): grupos combatidos por Mussolini (cuyas bondades ha resaltado recientemente Berlusconi) gracias a los buenos oficios del Tribunale Speciale y la OVRA, la policía política, entre cuyos logros cabría resaltar la caza y captura de Gramsci; y grupos armados en la alemania nazi –Círculo de Kreisau, Rosa Blanca, Círculo Solf, Capilla Roja- así como las númerosas células organizadas en el exterior: Milorg en Noruega, Denmarks Frihedsraad en Dinamarca, Hetverzet en Holanda y Paises Bajos, maquis, Front national, Combat, Liberation Nord y Sud en Francia... en total, una cifra espeluznante de tres millones de “terroristas” que además contaban con la complicidad de algunos sectores de la población que incomprensiblemente rechazaba los favores y atenciones del pueblo elegido de superhombres rubios y paso de oca.

25/09/03

 
       

Versión para imprimir

 
   
 

| Principal | España | País Vasco | Internacional | Antiglobal | Antimúsica |
| Pensamiento autónomo | La violencia como herramienta de lucha política | Alizia Stürtze |
| Reconstruyamos la historia de América Latina | La prensa al servicio del neoliberalismo |
| Anticultura | Desenmascaremos a Garzón | Antirred [enlaces, campañas] |