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Madrid, Carlos Presente, Madrid :: 02/06/2011

[Vídeo] Se estrena el documental “Ojos que no ven. Víctimas del fascismo desde la transición”

Ojos que no Ven
Familiares (como la madre de Carlos), amigos y víctimas de ataques fascistas, juntos en el estreno del documental en los Cines Verdi de Madrid.

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Página del documental: http://www.ojosquenoven.org/Ojos_Que_No_Ven/Inicio.html

El fin de la impunidad de los agresores, el reconocimiento de las víctimas y la justicia son tres de las reivindicaciones de los afectados por la violencia fascista, que el pasado 25 de mayo se juntaron en Madrid para el estreno del documental “Ojos que no ven. Víctimas del fascismo desde la transición”. La película narra las historias de estas víctimas, que desde el fin del franquismo suman más de 100 muertos y 4.000 agredidos. También se proyectará el 16 de junio en Bilbao en el edificio de la Bolsa, y el 28 de junio -- Día del Orgullo Gay -- en los cines Yelmo Icaria de Barcelona.

"Dieciocho años después del asesinato de mi hijo, aquí estoy todavía luchando para que esta lacra acabe de una vez," aseguró emocionado Guillém Agulló, cuyo hijo Guillem, de 18 años, fue asesinado en Castellón en 1993 por un grupo de nazis cuando militaba en un colectivo independista. El asesino de Agulló, Pedro Cuevas, cumplió cuatro años de prisión, y en 2007 se presentó a las elecciones como candidato del partido ultraderechista Alianza Nacional.

"La película nos ayuda a hacer una gran reflexión, es un granito de arena para poder seguir en la lucha," añadió Miwa Buene, congoleño de 45 años que quedó tetrapléjico en 2007 tras recibir una paliza por parte de un ultraderechista que profirió insultos racistas durante el ataque.

"Han pasado 31 años desde el asesinato de Yolanda, pero sigo muy emocionado," añadió Alejandro Arizkun, compañero de Yolanda González, joven dirigente estudiantil que fue secuestrada y asesinada en febrero de 1980 en Madrid por un comando ultraderechista liderado por un miembro del cuerpo de seguridad de Carrero Blanco. "Tenemos que enfatizar que estos violentos están organizados en tramas y colectivos. En el caso Yolanda, la investigación se cortó en cuanto se supo quienes eran los implicados."

La película narra las historias de víctimas de crímenes fascistas y racistas a lo largo de las últimas décadas, y de sus familiares, amigos y defensores. Son ellos los protagonistas y los narradores de un documental producido por Hecho a Mano/Iria Producciones que desvela estos dramas, hasta ahora prácticamente desconocidos por la sociedad española.

"Las víctimas de la violencia de odio no tienen el reconocimiento que se merecen, así que nosotros no podemos dejar que caigan en el olvido," aseguró Mavi Muñoz, madre de Carlos Palomino, joven asesinado en el metro de Madrid por un militar simpatizante de la organización ultraderechista Democracia Nacional. Muñoz presentó a la Asociación de Víctimas de la violencia fascista, racista y homófoba, que engloba a este colectivo.

La película da voz a las víctimas: inmigrantes, homosexuales, gentes de izquierda e indigentes que han sufrido agresiones, y familiares de las personas asesinadas. También hablan miembros de asociaciones, teatros, y de organizaciones políticas y sindicales cuyos locales han sido blanco de atentados con explosivos.

A partir de un drama personal, la película conecta con una realidad social que, según su realizador, Luis Moles, no es producto de la casualidad. "No son casos aislados, ni de peleas de jóvenes ni de tribus urbanas," explica Moles. "Se trata de una violencia política que ha truncado la vida de miles de personas. El goteo de asesinados y agredidos no para de crecer, mientras que en muchos de los casos los agresores no han sido llevados a la justicia o están en la calle tras cumplir brevísimas condenas." La película abre importantes interrogantes: ¿Se investigan las agresiones? ¿Se persigue a tramas organizadas y a los culpables? ¿Se hace justicia? ¿Se reconoce a las víctimas?

A raíz de estas tragedias se han producido una serie de reflexiones entre los familiares y amigos que nos ayudan a entender la sociedad en la que vivimos. "Tienen mucho que decir y aportar, puesto que si no lo eran ya antes de su desgracia, hoy se han convertido en luchadores por la libertad," explica Moles. "Y salvo en casos excepcionales, son muy pocas ocasiones en las que estas personas son escuchadas."

Página del documental: http://www.ojosquenoven.org/Ojos_Que_No_Ven/Inicio.html

 

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