Manifestación en Mallorca en homenaje a las víctimas del fascismo, 2 años sin Carlos

Hoy hace dos años, el antifascista Carlos palomino de tan sólo 16 años fue brutalmente asesinado por un militar fascista, en el metro de Madrid, cuando iba a protestar por un acto del partido fascista Democracia Nacional.Dos años después salimos a la calle , por primera vez, para rendirle homenaje a Carlos y a todas las víctimas del fascismo de calle. En el estado español, el nazi-fascismo y sus partidos políticos, continuan campando a sus anchas por nuestras calles, con la connivencia de los aparatos del Estado: tanto judiciales, como políticos y policiales.

Desde la mal llamada transición política, que fue un lavado de cara de la dictadura fascista franquista, los aparatos del Estado estan copados por los mismos fascistas de antes, ahora reconvertidos en demócratas burgueses de toda la vida. La Audiencia Nacional es la continuación del tristemente famoso Tribunal del ordén público. Las fuerzas de seguridad no fueron depuradas de sus responsabilidades después de la dictadura, así como tampoco el ejército. En definitiva, no cambiaron nada, reformaron el sistema fascista para dar una imagen democrática al mundo. Pero ya no engañan a nadie. Hoy 31 años despues, las cosas continúan tal como estaban, maquilladas pero sin ningún tipo de avance real, ni para la clase trabajadora ni para los pueblos sometidos a los intereses de la clase dominante.

El capitalismo continúa dejando entrever su verdadera cara opresora, de rechazo y represión a las organizaciones que plantean un cambio en su própia estructura que nos pueda llevar hacia una democratización del sistema y avanzar hacia una verdadera democracia popular, de clase. Al estado español, la burguesia, para eliminar los derechos nacionales y de clase de los pueblos se sacó de la manga una Ley de partidos, que tan sólo se aplica a la disidencia vasca. En cambio, los partidos fascistas que, por esta misma ley, tendrían que ser declarados ilegales, continúan presentándose a la farsa electoral cada 4 años. Así como a las europeas, con casos sagnantes como es el de Manuel Canduela (presidente de Democracia Nacional).

Tampoco podemos esperar nada de un Estado que ampara y protege a sus lacayos fascistas. Tenemos que ser nosotros desde la calle, quiénes tenemos que ganar esta lucha. Por eso se necesita la organización entre la gente conscienciada, para combatir el capitalismo, la burguesia, que cuando vea en peligro sus privilegios, acudirá innevitablemente al fascismo. Es la misma eséncia del sistema, basada en la explotación y la discriminación de la clase trabajadora y de los pueblos.

Luchemos pues por nuestros derechos: como clase y como pueblo. Y luchemos contra el fascismo de calle y de salón.

EL ESTADO SEÑALA, Y EL NAZI APUÑALA