Brutal agresión policial a los vecinos de El Vacie.

El pasado día 17 de Junio la policía local entro en El Vacie, histórico asentamiento chabolista en el norte de la ciudad de Sevilla, persiguiendo a un supuesto ladrón de coches. En la persecución el coche se estampó contra una casa, y el conductor aprovechó la confusión creada para escapar de la policía. Los vecinos, sobresaltados por el accidente, salieron de sus casas y la policía al ver a tanta gente les entro miedo y pidieron refuerzos. Juan Flores, un vecino que había acudido al igual que los demás a ver lo que sucedía, debió increpar a los policías, que eran cada vez mas y estaban tomando el barrio, porque estos empezaron a golpearle sin mediar ninguna agresión previa. Martín Saavedra, que salió en su defensa, también recibió. Cinco personas más tienen parte médico de los golpes. Juan y Martín, casi inconscientes, fueron esposados y llevados a la comisaría siendo inocentes. El reseguido no ha sido detenido.

La Asociación Pro-Derechos Humanos recogió las siguientes declaraciones de vecinos:
Ma. Dolores Priego (29 años):"Por lo menos ocho o diez policías estaban en un callejón dando de palos a mi marido, que se había levantado de la siesta para ver qué pasaba. El no agredió a nadie, como mucha gente pudo ver. Yo me metí en medio para que no le pegaran más. Entonces me cogieron del pelo y me tiraron contra la pared."

Mercedes Vázquez (38 años): "Salimos a ver el porrazo tan exagerado y vimos que estaban pegando a Dolores. Mi marido le pidió el número de placa a los policías porque, que sepamos, no se puede pegar a una embarazada. Le tiraron al suelo y le empezaron a pegar delante de todos los niños. Mi niña y yo nos echamos encima del padre, pero no dejaron de pegarle. A mí me cogieron del pelo y se liaron conmigo y con la niña a palos. Esto no es justicia lo que hacen con nosotros. Martín es un hombre muy trabajador."

La policía local por su parte afirma que al llegar al asentamiento en persecución del coche, fueron atacados por los vecinos con piedras y botellas. Pidieron refuerzos y se originó una batalla campal que terminó con diez agentes heridos y dos sospechosos detenidos.

Siempre que la policía le pega una paliza a alguien, acaban siendo ellos los agredidos, no necesitan ni parte medico ni nada. Una vez mas, como en el caso de Teletech, la policía actúa machacando a gente que ni siquiera se defiende y con total impunidad, ahí esta el delegado del gobierno (socialista) y el Ayuntamiento (socialistas e izquierda unida) para defenderles contra viento y marea.