Un sabotaje a las obras de peatonalización del Cabanyal causa daños en 24 máquinas

Las contratas realizaron pronto las reparaciones y cambiaron las 71 ruedas pinchadas

Máquinas sin combustible. Los autores echaron azúcar en dos depósitos.

Las obras de peatonalización de distintas calles del Cabanyal y el Canyamelar, cuya ejecución figura en el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri), han registrado varios actos vandálicos con daños en 24 máquinas, entre vehículos y depósitos de combustible, y unos perjuicios económicos valorados en casi 5.000 euros, según han indicado fuentes municipales, quienes han apuntado que «los hechos apenas tuvieron incidencia en la ejecución de los trabajos».

Los autores de los hechos recorrieron prácticamente los dos barrios pinchando más de 70 ruedas de las 24 máquinas, entre vehículos y depósitos de combustible, que se utilizan para ejecutar las obras entre las calles Francisco Cubells y Pintor Ferrandis.

«O sea- y según las mismas fuentes- quienes lo hicieron o eran varios grupos bien organizados o uno solo se dedicó a recorrer los dos barrios de norte a sur o de sur a norte pinchando las ruedas y volcando azúcar en los depósitos de combustible contra unas obras que benefician al Cabanyal-Canyamelar». Los daños causaron que la actividad al día siguiente tuviera lugar bajo mínimos.

Para los responsables del equipo de gobierno lo sucedido no tiene mucha explicación. «Los vecinos y colectivos sociales de la zona están de acuerdo en la ejecución de los trabajos, aunque pueda haber diferencias en su desarrollo, que cumple con el planeamiento aprobado. Los vecinos exigían hace tiempo la ejecución del plan en las zonas que no estuvieran afectadas por la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez. Los residentes se han quejado por la pérdida de plazas de aparcamiento, algo en lo que discrepamos, pero en poco tiempo comenzarán varios estacionamientos subterráneos», comentaba ayer el concejal de Coordinación de Obras en la Vía Pública, Francisco Lledó, y el responsable de las obras.

Lledó lamentó los hechos y espera que haya sido un suceso aislado y no vuelva a reproducirse. «Las contratas lo denunciaron en la comisaría y ahora la policía investiga para detener a los autores», comentó.Las seis empresas adjudicatarias de las obras, tanto las encargadas de la pavimentación como de los servicios de conducción de agua potable, han comunicado los daños a las aseguradoras. Además, en la misma noche de los hechos aparecieron pintadas en distintas calles con símbolos anarquistas y exigiendo la liberación de presos. Los trabajos deben terminar antes de navidades.

Fuente: El levante- Un sabotaje a las obras de peatonalización del Cabanyal causa daños en 24 máquinas

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Un sabotaje de tinte anarquista provocó la semana pasada daños en una veintena de vehículos utilizados para unas obras de urbanización en el barrio del Cabanyal. Los hechos ocurrieron en la madrugada del viernes y se saldaron con cuarenta ruedas pinchadas y varias pintadas donde se pedía solidaridad y libertad para los presos.

Los vehículos afectados pertenecen a las empresas Pavasal y Elecnor, así como a otros de la concejalía del Ciclo Integral del Agua. Las obras suponen una inversión de tres millones de euros e incluyen la urbanización integral de ocho calles y plazas en esta parte del Marítimo.

El acto de vandalismo no provocó grandes retrasos en la ejecución de los trabajos, que finalizarán el próximo mes. Fuentes municipales indicaron que el mismo día se cambiaron las ruedas pinchadas, sin más incidentes hasta la fecha.

Esta no es la primera vez que ocurre algo parecido en el Marítimo. Hace años y durante la construcción de unos pisos para realojos en la calle Isabel de Villena, algunas máquinas también fueron víctimas de un sabotaje.

La reurbanización comprende las calles Rosario, Escalante, Progreso, José Benlliure, Pedro Maza y Remonta, así como las plazas Cruz del Canyamelar y Virgen de Vallibana. Las mismas fuentes indicaron que distintas empresas de servicios públicos aprovechan el cambio de pavimento para renovar sus canalizaciones. A pesar de las numerosas zanjas abiertas, los daños se limitaron a las ruedas de los vehículos.

Técnicos de las empresas afectadas fotografiaron los daños para adjuntar las imágenes a las denuncias. Además de las pintadas, también se encontraron en el lugar el clásico símbolo anarquista de la letra "A" enmarcada en un círculo.

Estas obras de urbanización han sido criticadas en las últimas semanas por los residentes, debido a los cortes de tráfico, los desvíos obligados y la escasez de aparcamiento. No obstante, desde el Ayuntamiento se descarta en principio cualquier vinculación de este sabotaje con movimientos vecinales contrarios a la prolongación de Blasco Ibáñez.

La urbanización se enmarca en el plan de reforma del Cabanyal, fuera del ámbito suspendido por los tribunales. La intención del Ayuntamiento es ensanchar las aceras, aunque suponga la eliminación de un centenar de plazas de aparcamiento.