[ait russia KPAC-MAT] Ucrania: Apoyo mutuo, sacrificar la vida

La guerra es siempre lágrimas, sangre y bestialidad. Pero las personas siguen siendo personas incluso en condiciones tan monstruosas. A pesar del peligro para la vida, se apoyan mutuamente. El sitio "Asamblea", creado por los anarquistas de Kharkov, habló sobre el destino de una joven voluntaria, Yulia Koval, que ayudó a evacuar a los civiles en Saltovka y murió durante los bombardeos.

Según el sitio web, con el estallido de las hostilidades, Yulia, de 23 años, junto con su esposo Oleg, ayudaron a evacuar a la población de Severnaya Saltovka, que estaba bajo el fuego de la artillería rusa. Llevaron a los residentes a la estación, entregaron alimentos y medicinas gratis.

"De alguna manera no era nada cómodo estar sentado en casa, la gente llama por teléfono, pide ayuda, conocidos. Y Yulia dice: 'Vamos, por qué no, mientras haya combustible'. Empezamos a llevar a la gente a las estaciones, en algún lugar más lejos, fuera de la ciudad. Un amigo me pidió que sacara a su familia, él no estaba en la ciudad y estaban bajo bombardeos en Severnaya Saltovka. Y, por supuesto, acepté. Llegamos a este lugar. Yo estacioné el carro, pero aún no había bajado la gente”, recordó el esposo de Julia, Oleg.

Según le dijo Oleg al periodista de la Asamblea, el 5 de marzo estaban esperando a la familia de un amigo cerca de la casa al lado del gimnasio en la calle Дружбы Народов, 261. Allí se rompieron ventanas. Oleg llamó al dueño del salón, el gerente para el cual trabaja, y le pidió permiso para llevar dulces para su esposa allí.

“Corrí detrás de estos chocolates, y luego hubo la explosión. Estaba allí, pero todavía llené los bolsillos de estos chocolates y, por un lado, salgo satisfecho. Sabes, se siente como si fueras «Железный Феликс». Subo corriendo y veo que mi carro está roto... Claro, se me cae todo, brinco, corro para allá... Y ahí yace la familia que íbamos a recoger... Murieron... Pero yo no puedo encontrar a Yulia en absoluto ... Corrí, corrí, no había nadie, nadie podía ayudar. Finalmente encontré su cuerpo".

Unos días antes de la guerra, el 20 de febrero, señala la Asamblea, la pareja había celebrado su segundo aniversario de bodas. Yulia tenía 23 años. "Yulia y yo íbamos juntas a entrenar. Ella siempre fue amable, muy amable, comprensiva. Llevaban a la gente a otros pueblos, ciudades, donde la situación estaba tranquila. También ayudaron a mi familia, en marzo. El 4, se llevaron a mis padres de Saltovka a otra ciudad sin llevarse dinero, nada”, cuenta su amiga Margarita, a quien la voluntaria y su esposo ayudaron el día anterior.

Oleg tiene la intención de seguir ayudando a la gente más. La tragedia no lo quebró.

Además de esta información, le recordamos la posición de la KPAC: no apoyamos ni al estado ruso ni al ucraniano y no queremos la victoria de ninguno de los ejércitos o "pueblos". Estábamos y seguimos estando del lado de la gente común. Los que siempre sufren los enfrentamientos de los que están en el poder, pero siempre siguen siendo personas.

AIT-RUS