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Colombia :: 20/07/2004

Colombia - Otra ola de asesinatos y amenazas contra sindicalistas -

Editoriales el Piojo

"¡Han asesinado a una gran mujer, a una madre... No podemos seguir metidos en este mar de sangre, en esta barbarie. Todavía hay personas que amamos la vida!".

Las frases taladraban los oídos de quienes permanecían ayer en la tarde en la cuadra donde funciona la sede de la Defensoría del Pueblo Santander.

Eran los compañeros de Carmen Elisa Nova Hernández, la enfermera a quien dos sicarios asesinaron el jueves en la noche cuando llegaba a su residencia en el barrio Provenza de Bucaramanga.

Tal como lo informó ayer Vanguardia Liberal, los homicidas, que se movilizaban en una motocicleta oscura, se acercaron a la mujer de 47 años, la lanzaron al piso y le dispararon tres veces en el cráneo.

Nova Hernández trabajó durante 28 años como auxiliar de enfermería en la Clínica Bucaramanga. Actualmente, era Fiscal del Sindicato de Trabajadores de Clínicas y Hospitales de Santander, Sintraclínicas.

"Ese fue su único pecado, ser sindicalista. Ese es el pecado de muchos en este país, donde sólo este año han matado casi a treinta", dijo la Presidenta del Sindicato de la Clínica Bucaramanga, quien junto con otros integrantes de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, vociferaban frases de rechazo contra los organismos del Estado, en desarrollo de una toma pacífica.

"Aquí permaneceremos, hasta que el señor Defensor David Augusto Peña nos dé una respuesta..." aseíguraban.

"La vida de Carmen Elisa estaba en peligro, eso lo sabían los organismos de seguridad del Estado. Habíamos lanzado alertas sobre lo que podía ocurrir, pero como siempre, no hicieron caso y ahí está la respuesta de los violentos...".

Sin embargo, el Defensor del Pueblo aseguró que si bien conocen de amenazas contra otros sindicalistas en la ciudad y el departamento, en el caso de Carmen Elisa, no tenían nada.

"No había nada. Ninguna alerta ni denuncia que indicara amenazas contra la señora. Contra otros sí", afirmó el Defensor, quien asistía a una reunión de Personeros programada con meses de anterioridad.

La Presidenta del Sindicato de la Clínica, sin embargo, dijo que ya había indicios de que podía ocurrir algo en contra del gremio. "Incluso hubo un intento de secuestro hace dos años", afirmó.

La mujer dijo además que el gremio atraviesa por momentos difíciles, porque "intentan levantarnos el fuero sindical no sólo a mí, sino a la vicepresidente del sindicato, así como a las personas que integran la comisión de reclamos".

Mientras ellos lanzaban consignas de protesta a la espera del Defensor del Pueblo, a pocas cuadras de allí la familia de Nova Hernández permanecía consternada en una de las salas de velación de la Funeraria San Pedro.

Uno de los hermanos de la mujer asesinada, aseguró que "jamás dijo que hubiera problemas, amenazas o algo. Es más, quienes la conocieron saben que era una mujer pacífica, de decisiones simbólicas, pero no de fuerza.

"La noticia nos tomó por sorpresa. Nadie se imagina que a una mujer como ella, madre de familia, que además vivía con nuestra mamá y su hija, la pudieran asesinar así...".

El cuerpo de la profesional, dijeron, será sepultado hoy a las 3:00 de la tarde en el Parque Cementerio Jardines La Colina de Bucaramanga, y no en San Gil, su tierra natal, como se preveía.

Rechazo de la CUT

Por su parte, los gremios sindicales de la capital de Santander, en especial la CUT, rechazaron de tajo el crimen cometido contra Carmen Elisa Nova, tildando el hecho como "parte de una campaña de exterminio contra Sintraclínicas".

"Ya en marzo de 2002, intentaron llevarse secuestrada a la Presidenta del sindicato, justo frente a las puertas del Ministerio de Protección Social. Con todo esto lo que quieren es desvertebrar la existencia del sindicato, mediante atentados personales o el montaje político a las directivas.

"La CUT y Sintraclínicas denuncian ante el mundo una vez más que el ejercer el derecho de asociación en Colombia, es castigado con la pena de muerte".

A la protesta por el crimen se sumaron el Sindicato de Trabajadores y Empleados Universitarios de Colombia, Sintraunicol Subdirectiva Bucaramanga, quienes aseguraron que "no basta con una simple denuncia, pues en este país del Sagrado Corazón y encomendado a Dios, cada cual cobra a su manera con la vida de sus semejantes, las divergencias y desacuerdos que surgen entre empleados y trabajadores".

De igual forma, el Sindicato de Trabajadores y Empleados de Servicios Públicos, Sintraemsdes, al tiempo que enviaban su condolencia a la familia, exigieron claridad en la investigación sobre la responsabilidad del hecho.

 

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