La izquierda en su laberinto
El anuncio por el micrófono de la llegada de Andrés Manuel López Obrador arrancó gritos y aplausos. Cientos de personas lo esperaban al anochecer en la pequeña explanada del Centro Social de la colonia Escuadrón 201, en la zona popular oriente de la capital. El líder prolongó su paso entre la valla de manifestantes. Lucía entero, sonriente, a pesar de que en los últimos días había encabezado más de 30 mítines, como ése, en apoyo de Clara Brugada, la candidata que había sido despojada de su triunfo en las elecciones internas del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para la delegación Iztapalapa, después de un cuestionado proceso jurídico en el que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) declaró como ganadora a su contrincante, Silvia Oliva.