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Europa :: 16/03/2008

Entrevista con José Luis Martín Ramos y Giaime Pala sobre la película italiana "Mi hermano es hijo único"

El Viejo Topo
La última película de Daniele Luchetti, Mi hermano es hijo único, narra las andanzas de dos hermanos unidos por el amor y la competencia, el uno primero fascista y luego hombre de bien, el otro primero comunista, y luego activista en la lucha armada.

Ubicada en los turbulentos años setenta, y a pesar de todas sus carencias, merece verse. Para hablar de ella El Viejo Topo ha reunido a José Luis Martín Ramos, profesor de Historia en la Universidad Autónoma de Barcelona, y a Giaime Pala, historiador italiano que reside en Barcelona.

Amor fraterno en tiempos difíciles. Una conversación entre José Luis Martín Ramos y Giaime Pala

El Viejo Topo: Hagamos balance. ¿Qué es lo que os ha parecido más interesante de la película? ¿Y menos?

Giaime Pala: Lo más interesante es sobre todo la puesta en escena, el entorno en que se rueda la película, es decir, Latina, una ciudad fundada por Mussolini en 1932 que muestra la arquitectura imperial típica del fascismo. Es muy eficaz la imagen que nos ofrece el director de la Latina de los años 60, con esa arquitectura imperial pero ya decadente, con la maleza creciendo en las bases de los edificios, que Luchetti contrasta con la familia de los dos hermanos, una familia proletaria, mostrando un imperialismo que no llegó a dar dignidad social y económica a la gente.

Y también es eficaz la visión que se nos da del hermano fascista, de Accio. Ahí se ve muy bien la iniciación política de los que componían el movimiento fascista. Los guionistas se han documentado muy bien en relación con esa manera de adherirse al Movimiento Social Italiano (MSI), a través de una rebelión muy caótica, muy a contracorriente de las modas, pues a mediados de los 60 ya empezaba a instalarse la moda de la izquierda, del marxismo... una moda crepuscular que luego desemboca en el 68. Yo creo que esa naturaleza del Movimiento Social Italiano, muy caótica, muy violenta, muy prepolítica, está bastante bien reflejada en la película. Película que, por lo demás, creo que es bastante floja.

El Viejo Topo: ¿Por qué te parece floja?

Giaime Pala: Es una película que no mide bien los tiempos, por ejemplo, no explica qué determina la evolución política del hermano mayor. Éste pasa de una militancia muy festiva, muy alegre, vital, a la desesperación de la lucha armada. Y esa es en ese contexto una cuestión muy importante que no está explicada. El hombre pasa del 68, de una revolución muy alegre, al callejón sin salida del terrorismo como si nada. Con los precedentes cinematográficos que existen en Italia sobre ese tema es bastante inexplicable que ese salto tan grande no se vea apuntalado con una explicación. Se ha tratado ya en muchas obras, tanto literarias como cinematográficas, y obviar las razones que impulsaron a algunos a tomar ese camino es un punto muy negativo de la película.

Quizá la causa hay que buscarla en un posible contraste entre los guionistas, Rulli y Petraglia y el director. Rulli y Petraglia son los guionistas de "La mejor juventud", una obra maestra sobre la generación del 68, sobre la evolución de esa generación. Yo intuyo una cierta falta de sintonía entre estos dos guionistas y el director. Los guionistas probablemente empujaban hacia un tono más dramático que el que al final tiene la película. Luchetti, que fue ayudante de dirección de Nani Moretti, cogió de éste ese tono un poco semiserio, de reflexión, pero con toques de humor e ironía. Y al final, ese contraste de lo semiserio con lo dramático hace que no se sepa muy bien por dónde va la película... Se podría decir que es una película un poco fallida en este sentido, porque no es una película definida. Además, la mirada de Luchetti es muy complaciente, muy tierna hacia sus protagonistas, pero claro, ellos están metidos en situaciones muy delicadas. Al final termina no digo que como una farsa pero sí un poco frívolamente...

José Luis Martín Ramos: Siguiendo un poco con la línea de Giaime, a mí la película me parece un producto light. Trivial. Se ve bien, pero al final no sabes qué regusto te deja exactamente. De acuerdo con que la puesta en escena está bien, y hay una buena interpretación por parte de los actores, especialmente por parte de Elio Germano, seguramente porque Accio es el personaje que tiene un dibujo más matizado.

El Viejo Topo

Leete la entrevista completa en la siguiente dirección: http://www.elviejotopo.com/web/archivo_revista.php?arch=983.pdf

 

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