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Expulsan a un vendedor de contratos colectivos de protección patronal
Para el movimiento obrero mexicano es muy positiva la decisión del Comité Ejecutivo Mundial de IndustriALL Global Union de expulsar de sus filas al llamado Sindicato Progresista de Obreros y Empleados de la Industria de Extracción, Fundición y Fabricación de Metales, Hierro, Autopartes, sus Similares y Derivados de la República Mexicana, afiliado a la Federación de Trabajadores Vanguardia Obrera de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, que regentea el famoso rompehuelgas y traficante de los derechos de la clase obrera Salim Kalkach Navarro. Es una decisión que debe ser aplaudida y apoyada.
La resolución de IndustriALL Global Union se adoptó en la reunión de su Comité Ejecutivo Mundial, celebrada los días 9 y 10 de diciembre de 2015 en Phnom Penh, Camboya, por no cumplir el “sindicato” mencionado con las normas de la organización, realizar acciones contrarias a los intereses de los trabajadores y negarse a suscribir el Memorándum de Entendimiento sobre los Contratos de Protección Patronal.
El señor Salim Kalkach es muy conocido por el sindicalismo democrático, los abogados laboralistas y los estudiosos del movimiento obrero mexicano. En un texto elaborado por trabajadores de la energía se señala que este individuo es el célebre “defensor” de las trabajadoras indígenas de las muñecas Barbie de Tepeji del Río de Ocampo, Hidalgo, explotadas por la empresa Mattel; “líder” que controla y maneja “cinco organizaciones en el DF, dos ‘independientes’, una afiliada a la CTM, otra a la CROC y una más a la CROM. Este ‘sindicalista’ negocia trabajadores de las industrias alimentaria, metálica, construcción y textil, mientras administra su propia Federación de Trabajadores Vanguardia Obrera (FTVO) y actúa como Secretario de Estudios de Restablecimiento con las Cadenas Productivas en la CROC”.
Salim Kalkach se especializa en reventar movimientos sindicales y destruir sindicatos combativos en beneficio de patrones corruptos. Para eliminar a organizaciones independientes “gana” recuentos sindicales, recuentos que se efectúan en lugares designados por la patronal, en forma pública, con policías y golpeadores en los establecimientos y con presiones abiertas sobre los trabajadores. Obtenida la titularidad, se reformulan los contratos colectivos con bajos salarios, eliminación de prestaciones sociales y aumento de las jornadas laborales.
De acuerdo con estudiosos del movimiento obrero mexicano y de periodistas de investigación, en nuestro país el 90 por ciento de los contratos colectivos de trabajo registrados ante las instancias correspondientes son de protección patronal. Gracias al régimen neoliberal de los partidos Revolucionario Institucional y de Acción Nacional, la burguesía ha logrado y logra imponer por medio de sindicatos fantasmas, ficticios o blancos una simulación de la contratación colectiva. Dicha situación, hoy día, está en crisis evidente, como lo muestran las huelgas de los trabajadores de la industria maquiladora, de los obreros agrícolas de San Quintín, Baja California, y de otros núcleos obreros de diversas ramas, así como la creciente demanda de trabajadores de las minas y empresas de las ramas del metal por adherirse al Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana.
Las condiciones actuales de la contratación colectiva en México, reflejan, sin la menor duda, que el gobierno antinacional de Enrique Peña Nieto permite y facilita la existencia de esta simulación contractual. Los ejemplos sobran. Así, el Grupo Walmart afilia a sus trabajadores al Sindicato Nacional de Empleados y Trabajadores de Supermercados, Centros Comerciales, Similares y Conexos de la República Mexicana de la CTM, que lidera Francisco Flores. Con el fin de liquidar al Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Vidriera del Potosí, el Grupo Modelo que encabeza María Asunción Aramburuzabala, la mujer más rica de México, recurre a los servicios del Sindicato Autónomo de Trabajadores y Empleados de Comercio, Industria, Agencias Aduanales y Similares de la República Mexicana, afiliado a la CROC y mangoneado por Salim Kalkach.
En la gran empresa galletera Gamesa se tiene firmado un contrato de protección con el llamado Sindicato Nacional de Obreros y Empleados de la Industria Alimenticia, sus Derivados, Similares y Conexos de la República Mexicana, que jefatura el cetemista Manuel Reyes Coria. En el medio laboral mexicano destaca Ramón Salvador Gámez Martínez, famoso pederasta que regentea el Sindicato Progresista Justo Sierra de Trabajadores de Servicios de la República Mexicana, mismo que suscribe contratos con empresas como Nike, Banco Unión, Banca Cremi, Sabritas, Cinemark, Sony Entretainment, Hewlett Packard y Daewoo.
Por la situación descrita, la resolución de IndustriALL Global Union en contra de Salim Kalkach y su sindicato de membrete desempeña un papel positivo.
