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Más de 450 muertos por enfrentamientos en dos semanas en la "democrática" Yemen
Según medios locales, al menos 455 personas murieron en Yemen durante las últimas dos semanas en choques registrados entre manifestantes y el Ejército, en el norte del país árabe.
Entre los fallecidos 55 eran soldados yemeníes, mientras que 400 eran gente que protestaba. Solo en los últimos dos días más de 200 personas, en su mayoría manifestantes, han perdido la vida en los choques registrados.
En tanto, miles de yemeníes siguen protagonizando protestas en las calles de la capital, Saná, para condenar las acciones del ejército, atacando y matando a los combatientes de la resistencia. La manifestación se produjo después de que aviones de guerra yemeníes Carried realizaron ataques aéreos sobre las posiciones mantenidas por los combatientes en la provincia norteña de Amran.
Las fuerzas del Ejército se enfrentaron con combatientes, matando a alrededor de 20 miembros de la organización. Cerca de 100 soldados murieron también en el ataque.
Tras el conflicto, las fuerzas armadas yemeníes y los combatientes alcanzaron este miércoles un acuerdo de alto el fuego con el respaldo de las Naciones Unidas. El acuerdo se realizó en la búsqueda de poner fin a la violencia del régimen en Amran, incluyendo el fin de refuerzos militares, despliegue de observadores militares, y la apertura de la carretera principal de Saná.
Por otro lado, la residencia del primer ministro del régimen yemenita, Mohamed Salim Basindawa, fue blanco este lunes de un ataque con fuego de fusilería por desconocidos a los que se supone miembros de una milicia armada de la resistencia.
Poco antes el enviado de la ONU para Yemen, Jamal Benomar, había sostenido una entrevista con el jefe del gabinete, que se encontraba en el lugar al momento del ataque. Las fuentes oficiales se han abstenido de proporcionar detalles de la acción y si hubo víctimas del fuego graneado de los atacantes que viajaban en un vehículo todoterreno y abandonaron el lugar sin ser detenidos.
Días atrás las autoridades del régimen alertaron a los funcionarios de las embajadas acreditadas aquí aumentar las medidas de precaución y evitar los desplazamientos fuera de la capital ante posibles represalias de la resistencia, por la ayuda que brinda esos países a la dictadura represiva.
