Falsos Positivos en Ecuador: una copia preocupante

“En la jerga militar y policial de Colombia, un “positivo” significa captura o eliminación de personas consideradas enemigas del Estado. Tales partes “positivos” siempre fueron premiados con ascensos, recompensas en dinero y vacaciones. Fue este abominable procedimiento del Estado, ligado a la Doctrina de la Seguridad Nacional, lo que detonó en Colombia los “falsos positivos” o crímenes de lesa humanidad. Desde siempre, como antes en Vietnam o en El Salvador, en Colombia se asesinan civiles y luego se presentan como guerrilleros.” ( Ivan Marquez, http://www.lahaine.org/index.php?p=9796 ). Al parecer ese vicio implementado por las políticas de seguridad imperial, ampliamente difundido por el parauribismo en Colombia, rápidamente han permeado las fronteras ecuatorianas.

Lo cierto es que el 18 de enero del año en curso 2 ciudadanos colombianos y uno ecuatoriano fueron muertos por el Ejército del Ecuador durante el desarrollo de un operativo en la frontera con el hermano país de Colombia, la información señalaba que estos fueron muertos cuando estos se movilizaban en un bote y ante la orden de detenerse y no cumplirla, los miembros de la patrulla ecuatoriana se vieron “obligados” a disparar.

Este enfrentamiento con los presuntos miembros de las FARC fue en el marco de la operación adelantada dentro del plan “septentrión1” realizado por la denominada Fuerza de Tarea Conjunta, que se constituye en nuevo dispositivo operacional que aglutina a las fuerzas de seguridad del Ecuador en la frontera norte.

También se debe recordar que en esa ocasión el Presidente Correa aseguró que dichos ciudadanos pertenecían a las FARC, por lo cual incluso fue felicitado por su homologo colombiano Uribe.

Pasado el impacto de esta brutal acción familiares, vecinos y conocidos de Orlando Tapia, José Sabino y Francis Omita han peregrinado estos meses por diversas instituciones y organismos de derechos humanos denunciando que este fue un asesinato y que los fallecidos no pertenecían a la guerrilla colombiana como tan profusamente se difundió. Esta situación nos lleva a ubicar algunos hechos que con regularidad se viene produciendo en diversos sectores de la frontera con Colombia y especialmente en la provincia de Sucumbios:

1. Habitualmente se vienen produciendo muertes, que son señaladas como resultado de confrontaciones con fuerzas insurgentes colombianas, lo que habla de una activa participación de nuestro país en el conflicto interno colombiano, a pesar de que la verborrea gobiernista acompañada de un discurso izquierdizante señala lo contrario.

2. Numerosas son las denuncias presentadas por pobladores del cordón fronterizo sobre arbitrariedades de las fuerzas militares y policiales y la permanente violación de derechos humanos en la zona.

3. Se ha establecido un rígido control no solo sobre las personas, sino fundamentalmente sobre los productos y el comercio, por ejemplo se controla la cantidad de alimentos que ingresan a los caseríos y veredas, y se impide el paso de productos en cantidades grandes bajo el argumento de que se va abastecer a la guerrilla colombiana, cuando tradicionalmente esta zona se ha caracterizado por el comercio y el flujo de alimentos y distintos tipos de mercancía hacia el sur colombiano.

4. El trabajo de inteligencia policial y militar se ha acrecentado vertiginosamente proveyendo de información e inventariando a la población, sus filiaciones y movimientos, un articulado que con la presencia militar permanente siembra el temor y el miedo como parte de la estrategia sicológica para convertir a la población en informante y colaboradora de las fuerzas represivas del Estado burgués.

5. Alrededor de 15.000 hombres de las Fuerzas Armadas se encuentran desplazados a distintos puntos de la frontera colombo ecuatoriana, y más de una vez se ha denunciado y mostrado evidencias de que la estrategia del yunque y el martillo, anunciada como parte de los planes militares contemplados en el denominado Plan Colombia viene ejecutándose, donde las fuerzas militares colombianas desarrollan operativos contra las FARC y las fuerzas militares ecuatorianas actúan de contención, para que desde el otro lado de la frontera.

6. La cooperación e intercambio de información entre las Fuerzas Armadas de estos dos países, en ningún momento se ha detenido - pese a la ruptura de relaciones diplomáticas- por ello es que oficiosamente, para evitar enredos legales, la primera comisión que dinamizaron en el proceso de reestablecimiento de relaciones es la COMIFRON, la Comisión Bilateral de Fronteras que es la que oficial y periódicamente se reúne para Intercambiar información de inteligencia y operativa.

7. El dispositivo operativo de las fuerzas armadas del Estado capitalista en el Ecuador ha significado un reordenamiento de su pie de fuerza, de su logística, de su personal, teniendo como eje ordenador la frontera colombiana ha donde se han desplazado los principales esfuerzos, pero la frontera colombiana como un hecho evidente el conflicto interno colombiano y dentro de ello la búsqueda incesante del imperialismo y el establecimiento colombiano por derrotar a las FARC-EP.

Un hecho más que nos va anunciando el camino emprendido por el Estado ecuatoriano y los poderosos grupos de poder que mantienen el control sobre el mismo y sus aparatos represivos y que es una tarea planteada para las revolucionarias y los pueblos del Ecuador, el construir el poder popular como alternativa cierta para una definitiva y verdadera independencia y revolución como parte de la construcción de la Patria Grande Latinoamericana.

* Colaboradora de ABP Ecuador
La Haine