La rápida movilización popular consigue la libertad de los Campesinos del FNCEZ

Con esa acción trataron de impedir sus actividades vinculadas a la lucha por la ocupación campesina de las tierras, que permanecen en manos del latifundio o que habiendo sido intervenidas por el Estado se eternizan en el laberinto burocrático antes de que sean distribuidas al campesinado desposeído. Allí, en la comisión de tales actos arbitrarios y represivos, parece haber tenido mucho que ver -según los campesinos- la presión del alcalde del Municipio Alberto Arvelo Torrealba en Barinas.

Tras haber pasado toda la madrugada en la Guarnición del Sabaneta y ser trasladados a la Policía del Estado Barinas, retenidos sin orden judicial y sin justificación legal de ningún tipo, además de haber sido sujetos a ofensas y maltrato físico -tal como lo denunciaron voceros relacionados con los afectados- los dirigentes campesinos fueron dejados en libertad plena. Pero antes, la policía trató de ponerles como condición la firma de una "caución" que implicaba la restricción de sus actividades como miembros de un movimiento social en lucha, a lo cual se negaron rotundamente. No obstante, gracias a la movilización rápida y oportuna de las comunidades campesinas y de los movimientos populares solidarios, además de la campaña informativa de los medios comunitarios y alternativos, los captores tuvieron que poner a los dirigentes del FNCEZ en libertad. Esta fue, por consiguiente -consideran- una "victoria popular".

A últimas horas de la tarde, una vez que salieron de las instalaciones policiales, los dirigentes campesinos se fueron rumbo a la Fiscalía General de la República y de la Defensoría del Pueblo a presentar sus denuncias. Ahora queda en manos de estas instituciones y del gobierno hacer las investigaciones pertinentes para ponerle freno a este tipo de atropellos y darle rápido cauce a las reivindicaciones justas del campesinado.

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Son 45 los dirigentes campesinos detenidos y maltratados en Venezuela

El Frente Nacional Campesino Ezequiel Zamora (FNCEZ) llama a concentrarse frente a la Policía del Estado :: Son 45 y no sólo 15 los dirigentes campesinos del FNCEZ detenidos por Ejército, CICPC y policía de Barinas, por promover la revolución agraria y la aplicación sin "guabineos" de la Ley de Tierras, protestar contra el paramilitarismo, el burocratismo y la corrupción

Los detenidos luego del allanamiento arbitrario, fueron movidos de la Guarnición del Ejército localizada en Sabaneta y pasados a la central de la Policía del Estado Barinas, en la Av. Pulido de esa ciudad. Allí comienzan a concentrarse activistas campesinos y luchadores populares en protesta y preocupados por el atropello a que están siendo sometidos sus dirigentes y otros compatriotas campesinos que les acompañaban.

Los acusan de "invasores de La Marqueseña", pero no hay ningún procedimiento legal en la detención. Por lo que es absolutamente arbitraria, informaron miembros del FNCEZ y de movimientos solidarios que ya se están concentrando en la zona en emergencia.

Los militares que están al frente de la operación son el Mayor Ustáriz, máximo directivo del Centro de Genética del Hato La Marqueseña, el Teniente Castro, y el teniente García, según pudo comunicar uno de los detenidos antes de que le arrebataran el celular. Los campesinos se quejan de que los están amenazando y les someten a vejaciones. Temen por su integridad física y hacen un LLAMADO URGENTE A LAS AUTORIDADES DE GOBIERNO, VICEPRESIDENTE Y PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, MINISTERIO PÚBLICO Y PARLAMENTARIOS DEL PROCESO para que tomen cartas en el asunto y detengan estas violaciones a los derechos. Particularmente, le recuerdan al Vicepresidente José Vicente Rangél su papel como interlocutor en las conversaciones anteriormente desarrolladas con los campesinos, y esperan que interceda con la urgencia del caso.

Como antecedente de estos sucesos mencionan que además de realizar asambleas campesinas y repartir propaganda, venían elaborando murales relacionados con la distribución de las tierras a los campesinos, contra el latifundismo y por el avance de la revolución agraria a partir de la aplicación de la Ley de Tierras, que según ellos se encuentra estancada por factores obstruccionistas. Reportan que cuando estaban dedicados a la pinta de los murales se les acercó el Alcalde Aníbal Chávez, del Municipio Alberto Arvelo Torrealba, quien les habría amenazado y les conminó a suspender esa actividad, porque según las palabras que le atribuyen "estaban promoviendo la ocupación de tierras, que eso era problema del Estado y que eso iba contra el presidente Chávez".

Pero los campesinos afirman la convicción profunda de que su actividad es parte genuina y consecuentemente de la lucha por la profundización de esta revolución de la que ellos son protagonistas y que funcionarios del Estado no pueden atribuirse autoritariamente el monopolio de la revolución, falsamente entendida como una acción que se produce desde arriba sin tomar en cuenta a las bases y a las masas. La revolución agraria la entorpecen y no la hacen los burócratas sino el campesinado mismo, y los que no lo entiendan así son los que están perjudicando a la revolución y al gobierno del presidente Chávez.

De la misma manera, voceros de movimientos populares solidarios, manifestaron preocupación por el deterioro de las relaciones cívico-militares que los responsables de estos métodos, característicos de la contrarrevolución y no de la revolución, vienen produciendo en desmedro de los logros obtenidos a lo largo del proceso de cambios que lidera el presidente de la República.

Como respuesta a la detención y posterior traslado de los dirigentes del FNCEZ, gente de comunidades campesinas trancó la Vía de La Veguita y se esperan otras repercusiones y acciones de movilización popular en el Estado Barinas.

El FNCEZ está haciendo un llamado a los campesinos, fuerzas sindicales del proceso y al movimiento popular revolucionario, a que se apersonen frente a la Policía de Barinas para defender los derechos y la integridad de los campesinos víctimas de este atentado contra los principios máximos del bolivarianismo, de la democracia participativa y protagónica, de la Contitución y de esta revolución que ha anunciado su vocación socialista.

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