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Palestina / Israel: ¿Quién le pone el cascabel al gato?
La clase obrera israelí es capaz de derrocar al sionismo, pero que no lo hará por el proyecto de un solo estado, porque no tiene interés de clase en este objetivo burgués
Por el contrario, la clase obrera árabe-palestina y sus aliados más cercanos, que sí tienen mucho que ganar de este proyecto, son en su mayor parte (a excepción de la minoría dentro de Israel) una fuerza externa, y son incapaces de derrocar al sionismo. Nos quedamos sin ningún agente social dispuesto y capaz a la vez de ponerle el cascabel al gato.
Moralmente hablando, algunas versiones del proyecto de un solo estado burgués supondrían una clara mejora en comparación con la realidad actual. Pero caer en quimeras utópicas no es útil, y puede ser un opiáceo perjudicial. El único objetivo en el que pueden converger y forjar una alianza los intereses y las fuerzas de las masas palestinas árabes y hebreas es el socialismo, que es necesariamente un proyecto regional, que no se limita al territorio de Palestina. No hay atajos para derrocar al sionismo. Tampoco el proyecto de un solo Estado burgués es una etapa intermedia hacia el socialismo. Una teoría de la “revolución permanente” que plantease este tipo de etapas intermedias - incluso si fueran válidas en otras situaciones coloniales, sobre lo que tengo serias dudas - es absolutamente inaplicable a este caso particular. Solo el socialismo en toda la región ofrece la posibilidad de una solución positiva del conflicto palestino-israelí.
