lahaine.org
Pensamiento :: 27/09/2010

Huelga, educación pública, futuro

Gonzalo Romero

Una huelga general nunca es una buena noticia para el conjunto de ciudadanos y ciudadanas de un país. Y no lo es porque detrás de ella se agolpan y hacinan siempre situaciones sociales y políticas de una especial gravedad para lo que podríamos denominar la convivencia democrática del conjunto de la población. Que los sindicatos mayoritarios convoquen a este paro general viene determinado, tal y como señala, entre otros, el colectivo Baltasar Gracián por “la envergadura de las medidas cuestionadas que sobrepasan a lo que se dirime en la pelea por un convenio o problema puntual de un sector, sino conquistas y derechos fundamentales del conjunto de l@s trabajadores con el pretexto de la crisis”. Estamos de acuerdo en que solo los muy ciegos o muy cínicos pueden tratar de minimizar el alcance de los contenidos de esta reforma laboral. Claro que la reducción de prestaciones y de plantillas en los servicios públicos y la ruptura unilateral de acuerdos firmados están ya a la orden del día, a ejemplo de lo sucedido en las empresas privadas, llegando a penetrar en sus efectos a los trabajadores públicos de escuelas, institutos y universidades.

Ningún sector de los y las trabajadoras quedará indemne de los planes de ajuste impuestos por quienes son los dueños del capital, banqueros, empresarios sin escrúpulos para pisar el acelerador de este desastre que se lleva por delante no sólo los derechos laborales conquistados a sangre y fuego por muchos de nuestros padres y abuelos, sino también las ilusiones de un futuro más justo, más libre, más solidario y más equitativo para el conjunto de los seres humanos.

Para todo ello los señores feudales del capitalismo actual, necesitan también y muy fundamentalmente del concierto con las escuelas para fabricar un individuo competitivo, cuya moral individualista genere la ceguera ante el dolor ajeno para seguir consumiendo ciega y convulsivamente, y salvarse de la quema, que finalmente será también la pira de los suyos. Un individuo al que la cooperación le resulte tan extraña y molesta que jamás se pregunte “qué tengo que ver yo con esto” y que ni siquiera entienda cómo y por qué el nosotros colectivo pueda atemperar esta barbarie global.

Así es como un maestro solidario, crítico y creativo se convierte para ellos, en un enemigo. Sólo así se entiende cómo los diversos fascismos eliminaron en masa a los educadores que supieron ver en la escuela un espacio público de construcción cooperada de personas críticas, creativas y solidarias.

Sí, estamos en crisis y es necesaria la huelga general, pero nos quedaremos como estábamos, o peor, si no sabemos mirar hacia nuestros adentros de “clase media acomodada con el esto es lo que hay... sálveme yo de la quema” y realizar la necesaria autocrítica, más allá del cómo me afecta a mi salario esta vuelta de tuerca de los derechos laborales.

x Gonzalo Romero*


*Gonzalo Romero es miembro de la Asociación Cultural Candela
(Botón de muestra emitido el 25 de septiembre de 2010 en El Candelero, RVK, 107.5 FM)
www.nodo50.org/candela
 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal