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Estado español :: 30/12/2025

Anatomía de un instante. Continúa la farsa y la desvergüenza

Jordi Serrano Blanquer
La serie y el libro de Javier Cercas forman parte del blanqueamiento que el Reino de España hizo del 50 aniversario de la muerte del criminal y corrupto fascista Francisco Franco

He visto la serie de cuatro capítulos "Anatomía de un instante" producida por DLO Producciones para Movistar Plus+. Está protagonizada por Álvaro Morte, Eduard Fernández y Manolo Solo. Se estrenó el 20 de noviembre de 2025.

En teoría la trama se desarrolla alrededor del golpe de Estado del 23-F, en realidad trata del final del franquismo y el inicio de la democracia. El 23F es la excusa que se utiliza para desarrollar una tesis monárquica y muy reaccionaria. Se centra en el 23F cuando un equipo de militares fascistas encabezados por Antonio Tejero (David Lorente) asaltan el congreso para intentar poner un militar de jefe de gobierno, en concreto a Alfonso Armada. Quieren aportar un toque de gallardía española al darle importancia a las tres personas que no se agachan ante las balas disparadas por los fascistas: Adolfo Suárez (Álvaro Morte), Santiago Carrillo (Eduard Fernández) y Manuel Gutiérrez Mellado (Manolo Solo).

La tesis del libro de Javier Cercas y de la miniserie es que estos tres personajes traicionando a su propia gente trajeron la democracia a España con la ayuda inestimable del rey Juan Carlos I. Es un planteamiento de un retorcimiento mental muy considerable, considerar que de las traiciones puede salir algo bueno. Es como la idea capitalista que del conjunto de egoísmos puede salir una sociedad armónica. De entrada, se olvidan de citar a Juan Carlos I como el mejor traidor. Asesina a su hermano, traiciona a su padre, Don Juan, y traiciona sus propios juramentos, primero a los Principios Fundamentales del Movimiento Nacional y la fidelidad a Franco, para pasar al juramento de la Constitución española.

La serie documental como tal es lamentable por dos motivos, en primer lugar, porque cinematográficamente es muy pobre. Una voz en off nos va recordando concretamente lo que pasa. Pocos recursos. Y en segundo lugar y más importante es una estafa a lo que los historiadores han establecido. Pondremos ejemplos claros de la tergiversación increíble en la serie. Está todo lleno de trampas y medias verdades. Por ejemplo, teatralizan una parte del discurso de toma de posesión como rey del 22 de noviembre de 1975, pero escogen este fragmento: "Os prometo firmeza y prudencia. Confío en que todos sabremos cumplir la misión en la que estamos comprometidos. Si todos permanecemos unidos, habremos ganado el futuro. ¡Viva España!"

Pero en el mismo discurso decía lo siguiente: "Una figura excepcional entra en la Historia. El nombre de Francisco Franco, será ya un jalón del acontecer español y un hito al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación del Estado. Su recuerdo constituirá para mí una exigencia de comportamiento y de lealtad para con las funciones que asumo al servicio de la Patria. Es de pueblos grandes y nobles el saber recordar a quienes dedicaron su vida al servido de un ideal. España nunca podrá olvidar a quien como Soldado y Estadista ha consagrado toda la existencia a su servicio."

Otra escena obscena es cuando el rey le pide a Suárez que dimita. No se cuentan los motivos, pero pocos minutos después de esta escena pasa una cosa que no explican. El rey deja encerrado a Suárez con cuatro generales -uno de ellos, Milans del Bosch, el que saca los tanques en las calles de Valencia-, que le exigen su dimisión. Otro, el general Pedro Merry Gordon, llega a poner una pistola encima la mesa.

Tampoco explican que en la mañana del 23F de 1981 los hijos del rey, Elena, Cristina y Felipe no van a la escuela. Claro, el rey no sabía nada y Armada lo traiciona. Vamos, ¿nos toman por tontos?

Además ¿con qué legitimidad el rey puede pedir la dimisión de Adolfo Suárez? ¿Porque era un dictador hasta junio de 1977? Nadie en su sano juicio puede creer que Alfonso Armada diera pasos si no fuera por orden de Juan Carlos. Armada asume sin rechistar la lealtad al rey incluso cuando este se desentiende de él y acaba en prisión. Es tan leal que incluso después de salir indultado de prisión por Felipe González, nunca explicó la verdad. (González indultó a golpistas que asaltaron el Congreso y sacaron los tanques a la calle, pero encuentra horroroso los indultos a republicanos independentistas pacifistas). Además, si la tesis de Cercas y de la serie es cierta, ¿por qué no desclasifican los documentos secretos del 23F?

El padre del rey ahora mismo ha declarado "tras cuarenta años de dictadura, le di a los españoles una democracia que sigue viva; es mi herencia". Javier Cercas, izquierdoso no practicante escribe "Sin el Rey no habría democracia". Vaya. Cercas y la serie televisiva, tapan la responsabilidad del rey en el golpe de Estado, pero en cambio ven en la revuelta catalana de 2017 "un intento frustrado de autogolpe civil posmoderno".

Y Cercas tiene la cara dura de decir que como ha dedicado muchas horas a documentarse para su libro está libre de sospechas. Seguramente no leyó ni un libro serio de historia. En ellos se cuentan las contradicciones del relato de cómo llega la democracia a España. Que Victoria Prego, en los años ochenta del siglo XX, creara estos mitos es criticable, pero que 40 años más tarde continuemos con la misma plaga, me parece inconcebible.

Xavi Doménech en un artículo afirma que "La historiografía, que no la novela, ha asentado desde la década de los noventa del siglo pasado que el régimen no murió en la cama, ni tampoco en los palacios, sino en la calle." Explica además que el CIS preguntó en 1985 sobre a quién debemos la democracia: sólo un 13% señalaba a dirigentes institucionales, el 55% creía que eran las movilizaciones populares. El CIS en seguida encontró una solución: dejaron de preguntar.

Se da en el pseudodocumental una importancia decisiva a la aprobación de la Ley para la Reforma Política por parte de las Cortes franquistas. Vaya. No había partidos políticos ni libertad de expresión, ni periódicos, ni teles, ni radios con posibilidad de pedir el no en el referéndum. Votaron hasta los muertos. ¡Vaya patraña!

Ahora Javier Cercas pide la dimisión de Pedro Sánchez, claro: "carece de legitimidad para gobernar". Ya en Soldados de Salamina, en la parte inicial, destilaba una extraordinaria fascinación por el falangismo ilustrado. Como si la ilustración de un falangista o un fascista supusiera menos culpabilidad. Al contrario, un falangista inteligente es mucho más culpable de los asesinatos que un fascista analfabeto.

No, señor Javier Cercas y los señores que han hecho posible esta mini serie, la democracia la consiguieron después de muchas luchas, de muchas huelgas, de muchas manifestaciones, de muchas torturas (incluso siendo Juan Carlos I ya rey), de muchos años en prisión los obreros, los estudiantes, las mujeres y los jóvenes.

La libertad llegó gracias a la labor inconmensurable, la generosidad, la abnegación, la lucha, la entrega, la solidaridad, el altruismo, la fraternidad y la perseverancia de centenares de miles de personas que desde 1939 lucharon denodadamente por mantener en pie la llama de la decencia en este país.

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