Pablo Iglesias también se ha reunido en secreto con el PP

Hace tiempo que Pablo Iglesias hace política al más puro estilo castizo: sin que nadie se entere. No sólo se reunió con Zapatero, sino también con Esteban González Pons, jefe de la delegación del PP en el Parlamento Europeo y vicesecretario general del referido partido.
La reunión a puerta cerrada se celebró a mediados de diciembre a petición del jefe de Podemos. Tuvo lugar en las dependencias del Parlamento Europeo en Estrasburgo, aprovechando una sesión de la Eurocámara en la ciudad francesa y consistió en un largo almuerzo durante el cual Iglesias propuso a González Pons que el PP y Podemos luchen conjuntamente contra el PSOE.
Iglesias y González Pons departieron durante más de dos horas, en las que el máximo dirigente de Podemos llevó la negociaciación. La propuesta de Pablo Iglesias se centró en convencer a González Pons de que el PSOE es el enemigo común de ambos y que están ante una ocasión única para dejarlo fuera de la escena política.
El dirigente del PP se limitó a escuchar lo que le decía Iglesias, sin entrar al trapo en ningún momento. Esteban González-Pons es el jefe de la Delegación parlamentaria del PP en Bruselas después de que el cabeza de lista, Miguel Arias Cañete, fueran nombrado comisario de la Comisión Europea.
Iglesias eligió para esta reunión un lugar especialmente discreto, Estrasburgo, donde se celebra alguna sesión del Parlamento Europeo al mes, lejos de las miradas y los miles de funcionarios españoles que hay en la sede de la Eurocámara en Bruselas.
El cacique de Podemos mostró su habitual verborrea retórica, si bien el verdadero motivo de la comida era crear un frente común contra el Partido Socialista. Los últimos sondeos colocan al PSOE por debajo de Podemos, es decir, en situación de un “sorpasso”.
Este encuentro de Pablo Iglesias con un dirigente del PP tuvo lugar pocos días antes del que mantuvo con Zapatero y Bono en casa de este último. La reunión fue auspiciada por el expresidente del Congreso y la dirección del PSOE respondió con dureza a la iniciativa de Zapatero que, poco después coincidió en un acto con Monedero –número 2 de Podemos–, sin que se cruzaran saludo alguno.
Las reuniones y negociaciones con lo que Pablo Iglesias califica despectivamente como "casta" demuestran el doble lenguaje que es característico de este partido. Su estrategia va a consistir en recaudar los votos del PSOE en masa para cambiar el bipartidismo PP-PSOE por el bipartidismo PP-Podemos.

Por su parte, en la rueda de prensa que ha concedido esta mañana González Pons ha confirmado la reunión con el caudillo de Podemos, asegurando que mantiene con él una "relación cordial" desde el inicio de la legislatura europea. "Hablo con Pablo Iglesias igual que hablo con Pepe Blanco", ha dicho.

Según Pons la reunión se celebró a petición de Iglesias. "Las cosas casi siempre son lo que parece. Tanto Zapatero, como García-Page, como Bono y como yo nos hemos reunido con Iglesias para hablar mal de Pedro Sánchez". Zapatero, García-Page, Bono y Pons no son los únicos que "hablan mal" de Sánchez, sino que el adelanto electoral en Andalucía nada tiene que ver con la estabilidad del gobierno de Susana Díaz sino que responde a cuestiones internas del partido. "Estamos ante un 'susanazo' en toda la cabeza de Pedro Sánchez", asegura Pons.

"Los partidos de centro están cayendo en la Unión Europea", alerta Pons, quien ha insistido en que los únicos garantes de estabilidad son los partidos de centro que tradicionalmente han gobernado Europa. En el PP están convencidos de que en las próximas la caída del PSOE no será tan escandalosa como la de los socialistas helenos.

En el PP creen que el hundimiento del PSOE no les favorece, pero también son conscientes de que con Pedro Sánchez están avocados a ello. Al PP no le favorece que -al igual que en Grecia- se materialice el final del bipartidismo, por ello, ya se han buscado un nuevo rival: Podemos. El PP se disputará las próximas elecciones no con Pedro Sánchez sino con Pablo Iglesias.