Respuesta antifascista en el Paseo de Extremadura

En la madrugada del miércoles 29 de noviembre, los nazis hacían su particular aparición en escena en fechas cercanas al aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco. Esta vez, quemaban el local de Estrella Roja, un espacio autogestionado que en los últimos años viene desarrollando un proyecto cada vez más activo de cultural popular, tocando temas de solidaridad con América Latina así como de recuperación de la memoria histórica y antifascista en el estado español.

Estrella Roja retomó la lucha junto a la Coordinadora Antifascista de Madrid (asamblea de la cual forma parte), con más razón si cabe tras un 20N 2006 caracterizado por choques ideológicos entre los anticapitalistas madrileños. Ahora, la realidad se ha vuelto a imponer: el fascismo sigue vivo y hay que combatirlo con la movilización en la calle.

La participación fue menor de lo que muchos desearíamos, pero no hay que pasar por alto que superó con creces la cifra que la Coordinadora Antifascista suele reunir fuera de un 20N. El pasado 10 de marzo, 300 personas se concentraban junto al teatro Alfil en protesta por el intento de atentado con bomba que los nazis llevaron a cabo contra una obra de Leo Bassi que criticaba la religión. Poco después, el 12 de mayo, una cifra similar de personas se concentraba en la Plaza Hermanos Falco de Barajas, en respuesta a un ataque nazi con adoquines que sufrió el Centro Social Autogestionado Raíles.

Por otro lado, la reciente manifestación del 10 de octubre en Barrio del Pilar tuvo una afluencia mayor, pero hay que recordar que la Coordinadora Antifascista no suscribió la convocatoria porque ésta eludió recoger el derecho a la autodefensa así como hablar de "complicidad’ entre las fuerzas represivas y el fascismo.

Ahora, el 16 de diciembre, una convocatoria realizada a través de carteles fotocopiados y por Internet con apenas diez días de antelación, consiguió duplicar la participación en este tipo de movilizaciones urgentes, demostrando que la capacidad política del movimiento antifascista y antisistema no se detiene. El lema de la manifestación fue claro ("Vosotros fascistas sois los terroristas") y el título del manifiesto de convocatoria fue directo ("Basta ya de complicidad policial y judicial"). Así mismo, se reivindicó sin tapujos la autodefensa antifascista.

La manifestación empezó algo tímida, pero durante el recorrido fue tomando cuerpo mientras se iban sumando lxs rezagadxs. Llegó a tener 35 metros de largo y ocupaba los 6 metros del ancho de la calle (cerca de 700 personas). Muchos vecinos se asomaban curiosos al ver pasar la marcha por el Paseo de Extremadura, y cada tanto algunos saludaban efusivos.

Un miembro del colectivo anarquista Bandera Negra, mostraba su "solidaridad con los compañeros que han sufrido la agresión de los nazis", animando a "aumentar las acciones contra el fascismo en Madrid’.

Por su parte, una miembro del recientemente creado colectivo feminista Mujeres Autónomas, subrayaba que "la autodefensa feminista y antifascista son componentes que deben estar presentes en el plano teórico y práctico en todo tipo de movilizaciones. Por eso estamos aquí".

Un nutrido cortejo de activistas, en su mayoría jóvenes, daban calor a una fría noche preguntándose "¿estos atentados, quién los condena?".

Sin embargo, otros no estaban. Esa era la constatación del joven Brutus, del Centro Social Okupado La Casika, llegado desde Móstoles para mostrar su solidaridad antifascista. Comentaba con resignación la ausencia de algunos colectivos del ámbito anticapitalista madrileño y lamentaba, más allá de las diferencias, la falta de compañerismo militante que se respira en Madrid tras el último 20N. "Es tristísimo que, convoque quien convoque una manifestación, o va una gente o va otra. En este caso convoca la Coordinadora Antifascista y hay colectivos en Madrid que no han venido por ese motivo. La manifestación en sí está bien porque hay que movilizarse, pero me parece tristísimo que otra gente no venga habiendo habido una agresión y estando como estamos. Nos siguen atacando y no pasa nada; aquí han puesto bombas, han hecho lo que han querido y ni siquiera ha habido una detención. Mientras tanto, a cualquier persona de izquierdas le pillan con un tirachinas y le meten la Ley Antiterrorista. Por lo tanto la manifestación me parece bien pero me parece muy triste toda la mierda que hay en Madrid’, concluía.

Con todo, Alberto de la Coordinadora Antifascista valoraba con optimismo la manifestación. Afirmaba que "teniendo en cuenta que se ha preparado en poco más de una semana, vemos que el resultado es positivo. Hemos dado una necesaria respuesta a una situación que cada vez se da con más frecuencia: agresiones fascistas con total impunidad por parte de la policía y las administraciones. Por tanto, llamamos a la autoorganización en los barrios, a la formación de asambleas antifascistas, y cómo no, a participar en la Coordinadora Antifascista de Madrid’.

Por último, las declaraciones de un portavoz del colectivo Estrella Roja auguraban el inicio de mejores tiempos para el movimiento antifascista. Agradecía la solidaridad mostrada por "multitud de colectivos, incluso de algunos que no esperábamos" y valoraba que "reunir a tanta gente contra el fascismo en un barrio obrero como este, para nosotros es un éxito". Subrayó que "la agresión se dio con total impunidad, incluso cuando fuimos a hacer la denuncia a la policía, ni siquiera querían reflejar que eran grupos fascistas porque lo daban por hecho". Ante esto, "nosotros no pedimos más policía, no lo hemos pedido nunca ni lo haremos; para nosotros esto no es una cuestión de represión policial, sino de lucha obrera y popular".

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